Carta de Sor María Gabriela de Borja y Castro Pinós al Rmo. Señor Padre Francisco de Borja. Gandía, 31 de agosto del 1569

Sor María Gabriela Borja y Castro Pinós

Al Rmo. Señor Padre Francisco de Borja, mi señor,

General de la Compañía de Jesús en Roma.

Jesús María

Reverendísimo Señor: el santo nombre de Dios sea bendito que no nos ha castigado como amenazaba la enfermedad con que ha sido visitado V. Paternidad de la misericordioso mano del Señor nuestro, que de la mesma usando nos ha dejado a V. Paternidad para muy gran gloria suya, amparo de sus hijos y consuelo de sus siervos. Y como he sabido, por el P. Francisco Briones, es la mejoría y salud tan notable, que bien muestra ser efecto y milagro alcanzado por medio e intercesión de Nuestra Señora. Bendita sea ella. Amén.

Beso las manos de V. Paternidad por la merced y caridad que recibí con la imagen pequeña que el dicho P. Briones me trajo, la cual es muy devota y muy linda. Téngola en tanto que a mi señora madre no puedo acabar conmigo en enviarla, así por lo que la imagen representa como por las letras que en las espaldas della de mano de V. Paternidad vinieron escritas. Y para que V. P. me riña digo mi culpa que muchas veces beso el papel y firma, no pudiendo besar las manos que en él escribieron. Y no por esto me castigue V. Paternidad, que con misericordia se haya con mi flaqueza y miseria. Y reciba yo su santa bendición con firma de su mano, si no hubiere de dañar a su salud: y desta me mande avisar alguna vez, porque sería muy singular consuelo, y deste favor tomaría yo ánimo para pedir la bendición de V. Paternidad por cartas más veces que hasta ahora lo he usado.

Mi Rda. Madre Abadesa besa las manos de V. Paternidad.

Mi señora la Madre sor María de la Cruz ya escribe largo.

Sor Isabel Magdalena y los otros dos angelitos besan las manos de V. Paternidad. Son para dar mil loores al Señor por haberlas dotado de tantas gracias y comunicado tanta virtud. La bendición que V. Paternidad les eche aprovechará para que acrecienten en todo bien y consigan la perfección. El Padre Briones las ha visto y dará los recados que lleva a cada una.

Todas estas Madres besan las manos de V. Paternidad y tienen muy particular memoria en sus oraciones de pedir al Señor su salud y vida. Desean que V. Paternidad nos haga merced de acordarse deste Convento en sus santos sacrificios. Y particularmente sor Coleta de la Encarnación, a quien muy bien vuestra Paternidad conoce.

Y por no ser más prolixa acabo suplicando a Xto. Nuestro Señor guarde la Rma. persona de V. Paternidad por muy largos años para su mayor gloria y servicio, como deseo y, aunque pecadora, con oraciones sin cesar pido a su divina Majestad. Amén.

En Santa Clara de Gandía, último de agosto, año 1569.

De V. Rma. Paternidad sierva y muy obediente hija que sus Rmas. manos beso,

Sor María Gabriela