Selecciona una palabra y presiona la tecla d para obtener su definición.
Indice
Abajo

La Humanidad de Cristo no estorba para la contemplación [fragmento]

Sor María de Santo Tomás de Villanueva





Los místicos perfectos y espirituales, que tratan de contemplación, han tenido por duro decir que les ha sido de estorbo la Humanidad de Cristo para la contemplación de Dios; otros, al contrario, se persuaden les sirve de estorbo; y verdaderamente, si la palabra Humanidad se toma en el rigor que significa, no me espantaré que les sea estorbo, pero diré que ellos tienen la culpa, si bien nunca me persuado a que quieren decir tanto como significa la palabra Humanidad, que es un término que prescinde el Supuesto y la Divinidad [...]

[...] la Esposa es la Humanidad de que se compone Cristo en cuanto Hombre, y quien nos mereció estos bienes de sí mismo en cuanto Dios. Bien penetró esta razón la Iglesia nuestra Madre, que termina las más de sus oraciones con la palabra «por Cristo Señor nuestro», como confesando que de su intercesión poderosa espera todo bien; ¿pues qué necesidad tiene el que ora de hacer divorcio entre estos dos amantes desposados? No aparte el hombre los que juntó Dios, y pues en Cristo los tiene juntos, juntos los venere, juntos los adore, juntos los crea y juntos los ame; y esto es contemplar, creer y amar.

Estoy persuadida que, cuando dicen que la Humanidad les estorba, lo sienten así, porque la imaginación, que en muchas personas es muy viva, tan fuertemente hace aprehender lo corpóreo de Cristo como cosa tan corpórea y tan sensible, que les arrebata tras de sí todos los sentidos, y afectándose tanto a aquello, que la naturaleza toda se emplea allí; y deja menos lugar al entendimiento y al acto obscuro de la fe, en que el verdadero contemplativo primero se ha de poner para contemplar a Dios; y fundándose en esto, para decir que la humanidad les estorba, llaman Humanidad lo que verdaderamente es Hombre, porque cosa cierta es que no es su intención dividir de la Humanidad el Supuesto, y sólo la fuerza de su imaginación les hace parecer que n obran acerca de Cristo Dios, sino acerca de Cristo Hombre, y esto no puede ser malo, que Cristo Hombre, Dios es, y no acerca de la pura Humanidad, que no es Dios.





Indice