Misteriosa visión [fragmento]
Sor Josefa María García
Un día me suspendió mi amado Jesús, y me mostró un monte muy alto y desabrigado, y en toda su circunferencia no se veía cosa verde. En la cumbre del monte estaba mi Seráfico Padre San Francisco de Asís, con muchos otros sus compañeros de la Religión Seráfica. Y me dio a entender el Señor que yo también había de subir por aquellas asperezas a la eminencia de aquel monte, para ser compañera de mi Santo Padre; y que no faltarían materiales para fabricar la escalera.