81
A. Mutis, «De las montañas», en Los elementos del desastre, Buenos Aires, Losada, 1953, p. 74.
82
Miguel Ángel Asturias, Los ojos de los enterrados, Buenos Aires, Losada, 1961 (2ª ed.), p. 465.
83
Ibi, p. 466.
84
M. Á. Asturias, «Torotumbo», en Week-end en Guatemala, Buenos Aires, Goyanarte, 1956, pp. 205-206.
85
Cfr. a este propósito mi ensayo «Realtà e simbolo ne La muerte de Artemio Cruz», en G. Bellini, Il labirinto magico. Studi sul «nuovo romanzo» ispanoamericano, Milano, Cisalpino-Goliardica, 1973.
86
C. Fuentes, La muerte de Artemio Cruz, México, Fondo de Cultura Econòmica, 1965(2ª ed.).
87
M. Á.
Asturias declara a G. W. Lorez (Cfr, «Diálogo con Miguel
Ángel Asturias», Mundo Nuevo, 43, 1970,
p. 51, luego en G. W. Lorenz,
Diálogo con América Latina, panorama de una
literatura del futuro, Barcelona, Pomaire, 1972, p. 269) que «La
literatura es un río grande que cada vez se ensancha
más, y el hecho que este río no se angoste, sino que
empuje hacia el mar con nuevos e insólitos impulsos, es
maravilloso. Estos jóvenes autores y por cierto
también aquellos que posiblemente aún no se conozcan,
tomarán nuestro legado y lo continuarán
[...]»
.
88
Cfr. sobre el problema el «Informe 2» de la IV Conferencia realizada en Montevideo en abril de 1949, en Condiciones de vida y trabajo de las poblaciones indígenas de América Latina, Genève, Organisation International du Travail, 1949.
89
E. Rivera, La Vorágine, Buenos Aires, Editorial Losada, 1949, p. 246.
90
Ibi, p. 95.