Es
difícil encontrar entre la extensa biografía de W. S.
referencia sobre el libro de versos El peregrino
apasionado. Existen datos sobre la fecha de su
publicación, las críticas por parte de los
interesados y poco más.
La
referencia más completa con que pude desarrollar este
trabajo la encontré en un libro de literatura inglesa del
profesor Edward Dowden, de la Universidad de Dublín, con el
título de Shakspeare, publicado en Londres con
fecha de 1918.
El peregrino apasionado se publica por primera vez en 1599
por William Jaggard, y en todo lo posteriormente consultado existe
la coincidencia de que es un libro pirata, que ocasionó
bastantes críticas sobre la autenticidad de los versos
atribuidos a W. S.
Pasemos al estudio de los poemas con la numeración que
consta en el original:
N.º 1. Este soneto aparece en los
Sonetos de William Shakespeare, con el número 138 y
con variantes en los versos siguientes: 4-6-7-8-9-11-13 y 14, que
doy a continuación.
Variante del 4.º verso:
Unskilful in the
wold's false forgeries
El peregrino apasionado
(P. A.)
Unlearned in the
wold's flase subtleties
Sonetos, William Shakespeare
(W. S.)
Variante del 6.º verso:
Although I know
my years be past the best
(P. A.)
Although she
knows my days are past the best
(W. S.)
Variante del 7.º verso:
I smiling credit
her false-speaking tongue
(P. A.)
Simply I credit
her false-speaking tongue
(W. S.)
Variante del 8.º verso:
Outfacing faults
in love with love's ill rest
(P. A.)
On both sides
thus is simple truth suppres'd
(W. S.)
Variante del 9.º verso:
But wherefore
says my love that she is young?
(P. A.)
But wherefore
says she not she is unjust?
(W. S.)
Variante del 11.º verso:
O, love's best
habit is a soothing tongue
(P. A.)
O, love's best
habit is in seeming trust
(W. S.)
Variante del 13.º verso:
Therefore I'll
lie with love, and love with me
(P. A.)
Therefore I lie
with her, and she with me
(W. S.)
Variante del 14.º verso:
Since that our
faults in love thus smother'd be
(P. A.)
And in our
faults by lies we flattered be
(W. S.)
N.º 2. Soneto que con el número 144
aparece en los Sonetos, con variantes en los versos:
2-3-4-8-11 y 13.
Variante del 2.º verso:
That like two
spirits do suggest me still
(P. A.)
Which like two
spirits do suggest me still
(W. S.)
Variante del 3.º verso:
My better angel
is a man right fair
(P. A.)
The better angel
is a man right fair
(W. S.)
Variante del 4.º verso:
My worser spirit
a woman colour'd ill
(P. A.)
The worser
spirit a woman colour'd ill
(W. S.)
Variante del 8.º verso:
Wooing this
purity with her fair pride
(P. A.)
Wooing this
purity with her foul pride
(W. S.)
Variante del 11.º verso:
For being both
to me, both to each friend
(P. A.)
But being from
me, both to each friend
(W. S.)
Variante del 13.º verso:
The truth I
shall not know, but live in doubt
(P. A.)
Yet this shall I
ne'er know, but live in doubt
(W. S.)
N.º 3. Este soneto aparece en la comedia
Love's labour's lost, en la escena IV, que le dice
Longaville a María. Con variantes en los versos 2-8-9-10-11
y 14.
Variante del 2.º verso:
«Gainst
whom the world could not hold argument
(P. A.)
«Gainst
whom the world cannot hold argument
(W. S.)
Variante del 8.º verso:
Ty grave being
gain'd ures all disgrace in me
(P. A.)
Thy grave being
gain'd cures all disgrace in me
(W. S.)
Variante del 9.º verso:
My wov was
breath, and breath a vapour is
(P. A.)
Vows are but
breath, and breath a vapour is
(W. S.)
Variante del 10.º verso:
Then, thou fair
sun that on this earth doth shine
(P. A.)
Then thou, fair
sun, which on my earth dost shine
(W. S.)
Variante del 11.º verso:
Exhale this
vapour now; in thee it is
(P. A.)
Exhal'st this
vapour-vow; in theeit is
(W. S.)
Variante del 14.º verso:
To break an
oath, to win a paradise?
(P. A.)
To lose an oath
to win a paradise?
(W. S.)
N.º 4. Este soneto está inspirado en
Venus y Adonis y, por lo sabido de la forma y estilo de
Shakespeare en sus Sonetos, a pesar de las dudas de
algunos de sus críticos y biógrafos, estoy con los
que creen que este soneto es de W. S. Explicación que es
difícil encontrar en las críticas donde se duda y
basta.
N.º 5. Este soneto pertenece a la comedia
Love's labour's lost, y lo pone su autor en boca de Sir
Nathaniel en la escena IV de dicha obra, con las variantes en los
versos 3-4-6-11-13 y 14.
Variante del 3.º verso:
Though to myself
forsworn, to thee I'll constant prove
(P. A.)
Though to myself
forsworn, to thee I'll feithful prove
(W. S.)
Variante del 4.º verso:
Those thoughts,
to me like oaks, to thee like osiers bowed
(P. A.)
Those thoughts,
to me were oaks, to thee like osiers bowed
(W. S.)
Variante del 6.º verso:
Where all those
pleasures live that art can comprehend
(P. A.)
Where all those
pleasures live art would comprehend
(W. S.)
Variante del 11.º verso:
Thine eye Jove's
lightning seems, thy voice his dreadful thunder
(P. A.)
Thy eye Jove's
lightning bears, thy voice his dreadful thunder
(W. S.)
Variante del 13.º verso:
Celestial as
thou art, O do not love that wrong
(P. A.)
Celestial as
thou art, O do not love this wrong
(W. S.)
Variante del 14.º verso:
To sing heaven's
praise with such an earthly tongue
(P. A.)
That singes
heaven's praise with such earthly tongue
(W. S.)
N.º 6. Este soneto tiene las mismas
consideraciones de estudio que el número 4.º
N.º 7. Este poema está compuesto por
tres sextetos endecasílabos, y cada sexteto compuesto por
A-B-A-B C-C.
N.º 8. Este soneto se atribuye a Richard
Barnfield y aparece en Poems in drive humors, en 1598,
pero el estilo y la forma en la construcción del soneto es
idéntica a los de W. S.
N.º 9. La principal dificultad en el estudio
de este poema es que falta el segundo verso del primer cuarteto, y
por lo tanto el soneto está incompleto. No obstante, a falta
de este verso, el estilo y la forma de composición es de
Shakespeare. Probablemente autor del mismo.
N.º 10. Ni el estilo ni la forma de
composición son de Shakespeare.
N.º 11. Este soneto se atribuye a Bartolomew
Griffin, y apareció publicado en Fidessamore chaste than
kinde en el año 1596.
N.º 12. Este poema se compone de tres
cuartetos en el más puro estilo del creador de los
Sonetos; sin embargo, se duda en todas las referencias de
su autenticidad.
N.º 13. Este poema se compone de dos sextetos
en el estilo del poema anterior y con las mismas referencias
críticas.
N.º 14. Cinco sextetos idénticos a los
dos anteriores.
N.º 15. Cuatro cuartetos con las mismas
críticas sobre su autenticidad.
N.º 16. Este poema está compuesto por
dieciocho versos octosílabos, pareados por parejas, y
aparece en la comedia Love's labour's lost, dicho en el
acto IV por Dumain a Kate, con variantes en los versos 2-6-11-12-15
y 16.
Variante del 2.º verso:
Love, whose
month was ever May
(P. A.)
Love, whose
month is ever May
(W. S.)
Variante del 6.º verso:
All unseed' gan
passage find
(P. A.)
All unseed' can
passage find
(W. S.)
Variante del 11.º verso:
But alas! my
hand hath sworn
(P. A.)
But, alack! my
hand hath sworn
(W. S.)
Variante del 12.º verso:
Ne'r to pluck
thee from thy thorn
(P. A.)
Ne'er to pluck
thee from thy thorn
(W. S.)
Variante del 15.º verso:
Este verso se omite en el P. A.
Do not call it
sin in me
(W. S.)
Variante del 16.º verso:
Como el anterior, este verso se omite en P. A.
Than I am
forsworn for thee
(W. S.)
N.º 17. Se asegura que es de Weelkes,
aparecido en su Madrigales en 1597.
N.º 18. Poema compuesto por nueve estrofas de
seis versos, con idénticas características de
composición que el último cuarteto y el pareado final
del soneto 145 de Sonetos. Probablemente de
Shakespeare.
N.º 19. En mis investigaciones sobre este
poema, unos se lo atribuyen a Marlove y otros a Sir W. Ralegh.
N.º 20. Este poema no admite dudas, fue
publicado por Richard Barnfield en 1598 en su libro de poemas
Poems in drivers humors.
Después de estudiar los 21 poemas de El peregrino
apasionado y exponer mi trabajo con las hipótesis
reseñadas, existen ciertas dudas sobre las variantes de los
versos que se consideran auténticos, por haber aparecido en
alguna otra parte de la obra de W. S.
¿Fue el poeta el autor de las variantes? Difícil
respuesta cuando las variantes no proporcionan mayor calidad a los
versos originales.
¿Fue el editor o el poeta encargado de entregar estos versos
a la editorial el autor de los cambios? También es posible
tal hipótesis, sobre todo, teniendo en cuenta que estos
versos eran piratas.
También aparece en el original de El peregrino
apasionado, a partir del poema número 15, un nuevo
título: Sonetos para diferentes músicas
(Sonnets to sundry notes of music), que no merece mayor
comentario, pues a partir de aquí, precisamente, no existe
ningún soneto que pueda acreditar este título.
Versión lírica de Ramón García
González
El peregrino apasionado
- I
-
Cuando jura mi amada estar hecha
de verdades,
aunque sé que me miente, realmente la
creo,
sólo por que me crea un joven
inexperto,
poco diestro en las falsas estafas de este
mundo.
Pienso de esta manera que joven
le parezco,
5
aunque de sobra sabe que ya no soy tan joven.
Ingenuamente doy crédito a sus
mentiras
ya que los dos negamos la sencilla verdad.
Pero, ¿por qué no
dice que es falsa y embustera?
¿y por qué yo no digo que ya voy
siendo viejo?
10
Quizás porque el engaño es conducta
de amor
y en el amor la edad no quiere sumar
años.
Igual que a ella la miento, ella
miente conmigo,
y mediante mentiras, nuestro error halagamos.
- II
-
Yo tengo dos amores. Consolador
el uno
desesperante el otro. Tentadores
espíritus.
Mi ángel bueno es un hombre, hermosamente
bello
y el malo una mujer de mala catadura.
Por llevarme al infierno, mi
ángel femenino,
5
sedujo a mi buen ángel y lo apartó
de mí,
pervirtiendo a mi santo y haciéndole un
demonio,
sedujo su pureza con su infernal orgullo.
Y que mi bello ángel se
transformó en demonio,
es lo que me sospecho, aunque no lo aseguro,
10
pues lejos ya de mí y más
aún, siendo amigos,
presiento que hay un ángel en el infierno
de otro.
Nunca sabré que pasa y
viviré en la duda,
hasta que el ángel bueno expulse al
ángel malo.
- III
-
¿No fue que la
retórica celestial de tus ojos,
con la que el mundo nunca, discutir ha
podido,
quién dio a mi corazón, este
perjurio falso?
Los juramentos rotos no merecen castigo.
Traicioné a una mujer,
pero probarte puedo,
5
que siendo tú una diosa, no cometí
traición.
Mi voto era terrestre. Tú eres amor del
cielo.
Si gano tu favor, se cura mi desdicha.
Aliento era mi voto y el
aliento es vapor,
así pues, bello sol, que en esta tierra
brillas,
10
exhala ese vapor que a ti te pertenece
y si quebranto el voto, la culpa ya no es
mía.
Y si lo quebrantara,
¿qué tonto no es tan listo
que por ganar la Gloria no rompa un
juramento?
- IV
-
La dulce Citerea, posa junto a
un arroyo
con el joven Adonis, un dechado de encanto.
Ella enamora al joven con mirar amoroso,
miradas que esta reina posee en exclusiva.
Por deleitar su oído le
cuenta mil historias
5
mientras le muestra el cuerpo para captar su
encanto.
Por despertar su amor le toca en todas
partes,
con caricias tan suaves que a la pureza
rinden.
Mas fuese que a su años,
no entendía este juego
o porque no aceptaba su dulce ofrecimiento,
10
el bello adolescente no picaba el anzuelo,
sino que sonriendo se burlaba de todo.
Y al ofrecer su cuerpo
tumbándose de espaldas
él se levanta y huye. ¡Oh!
tímido insensato.
- V
-
Si amar me hace perjuro,
¿cómo jurar que amo?
¡No debiera jurarse sino es a la
belleza!
Y aunque ante ti perjuro me mostraré
constante.
Mi pensamiento es roble pero ante ti es un
mimbre.
Son tus ojos el libro que torna
el buen estudio,
5
donde están los placeres que todo el mundo
abarca.
Si el saber es estudio, saberse es
suficiente.
Que experta es esa lengua que sabe
describirte,
e ignorarte es el alma que te
ve y no se asombra.
Bien merezco el elogio por admirar tus
méritos.
10
Son tus ojos el rayo de Júpiter. Tu
voz,
su trueno, aunque sin ira. ¡Oh, dulce llama
y música!
¡Celestial cómo
eres no aprecies los errores,
de mis loas al cielo, con mi terrestre
lengua!
- VI
-
Apenas seca el sol el matinal
rocío
y ya el rebaño busca la sombra por los
setos,
la bella Citerea, consumida de amor,
impaciente esperaba la llegada de Adonis,
a la sombra de un sauce que
está junto al arroyo,
5
donde refresca el joven su gran
melancolía.
Si cálido era el día, más
ardiente está Venus,
recordando las veces que allí mismo se
vieron.
Por fin llega el mancebo,
arroja el manto al suelo
y se queda desnudo a la orilla del agua.
10
El sol miraba al mundo con sus ojos
gloriosos,
pero no tan ardientes, como el mirar de
Venus.
Esto lo advierte, Adonis, y se
mete en el agua.
«¡Júpiter!», dijo ella,
«¡quién pudiera ser ola!»
- VII
-
Siendo mi amada bella es mayor
su inconstancia.
Cual paloma es de suave, pero ni es fiel ni
honrada.
Brillante cual cristal y cual cristal de
frágil.
Más blanda que la cera y cual mohoso
acero.
Blanco lirio con cierto adamascado encanto
5
y torna su belleza en la mayor perfidia.
¡Cuántas veces sus
labios se unieron a los míos,
poniendo entre sus besos juramentos de amor!
¡Cómo creaba historias sólo
por darme gozo,
inquieta por mi amor y temiendo su
pérdida!
10
No obstante en aquel fondo de virtud
proclamada,
fidelidad y llantos, había sólo un
juego.
Ardía cuando amaba como
paja en el fuego
y cual paja su amor tan pronto se apagaba.
Ensalzaba el amo para matar su encomio,
15
rogando amor eterno para después
dejarlo.
¿Acaso era una amante o una infiel
libertina?
Mala en el mejor caso y en ninguno excelente.
- VIII
-
Música y Poesía
concuerdan plenamente,
como debiera ser por ser ambos hermanos.
Así que nuestro amor debiera ser
inmenso
puesto que tanto amamos los dos las mismas
cosas.
A ti, te es grato Dowland cuyo
son celestial,
5
encanta en su laúd el sentimiento
humano.
A mí, me encanta Spencer, cuya profunda
idea
por superarlo todo no precisa defensa.
Tú amas oír la
música, tan dulce y melodiosa
del rey del instrumento que es Febo en su
laúd
10
y yo en honda delicia, totalmente me anego
si siento a mi poeta iniciar cualquier canto.
Si a gusto de poetas el mismo
dios las rige,
el mismo ser os ama a las dos que en ti
moran.
- IX
-
Bella era la mañana
cuando la reina Venus,
pálida por la pena cual la blanca
paloma,
por culpa de aquel joven tan altanero y
libre,
bajaba de lo alto de una abrupta colina.
Llega, Adonis, con perros y su cuerno de
caza.
5
Ella, cándida reina, con piedad
amorosa,
prohíbe al cazador pasar de aquellos
límites.
«Vi», le dice, «a un hermoso y
bello adolescente,
herido entre estas matas por el vil
jabalí,
en uno de sus muslos. ¡Oh qué triste
visión!
10
¡Mira mi muslo!», dice,
«aquí estaba la herida».
Adonis mira el muslo y ve más de una
herida
y huyendo sonrojado, deja a la reina sola.
- X
-
¡Flor y rosa tan dulce!
cortada tan temprano,
arrancada en capullo y ajada en primavera.
Perla oriental brillante, apagada a
destiempo,
ser tan bello matado por el dardo mortal.
Como ciruela verde que del árbol
pendiera
5
y el viento hace caer antes de su momento.
Llorando estoy por ti sin causa
ni motivo,
puesto que al fin y al cabo nada heredo de
ti.
Sin embargo me dejas más que de ti
esperaba,
pues déjame decirte que nada deseaba.
10
¡Oh, mi querida amiga, quería tu
perdón
y sólo me has dejado tu eterno
descontento!
- XI
-
Junto al joven Adonis,
está Venus sentada
a la sombra de un mirto. Comienza a
cortejarle.
Cuenta al doncel que el dios Marte la
perseguía
y como sucumbieron ambos a sus encantos.
«Así», dice,
«el guerrero dios me tomó en sus brazos»,
5
tomando al bello Adonis entre sus propios
brazos.
«Así», dice, «el guerrero
dios me dejaba libre»,
pensando que el doncel iba a imitar sus
modos.
«Así», dice,
por último, «se adueñó de mis
labios»,
y tomando sus labios lo besó
largamente.
10
Mas al buscar aliento, él, se alejó
de ella
y no quiso atender los ruegos a su gozo.
¡Ay! Si también
pudiera tener cerca a mi dama,
para que me besara hasta que yo me fuera.
- XII
-
Mal suelen convivir, Vejez y
Juventud.
Una es todo cuidado, la otra regocijo,
mañana veraniega frente al tiempo
invernal.
Verano caluroso frente al baldío
invierno,
plenitud del esfuerzo frente al aliento
corto.
5
La Juventud es ágil, al Vejez
achacosa.
Osadía y calor frente al
débil pasmado.
Juventud indomable frente a Vejez domada.
Vejez, yo te aborrezco ¡Oh, Juventud te
adoro!
¡Oh admirable amor mío, mi amor es
siempre joven!
10
Vejez, te reto. ¡Oh! Dulce pastor
desaparece,
pues creo te has quedado ya demasiado tiempo.
- XIII
-
Vano y dudoso bien suele ser la
belleza,
relumbrante brillar que de pronto se esfuma,
una flor que en capullo, encuentra ya la
muerte,
fragilísimo vidrio que por nada se
quiebra.
Bien dudoso, brillar, un cristal, una flor,
5
pérdida, oscuridad, quiebra, que pronto
muere.
Y como el bien perdido rara vez
recobrado,
como el brillo apagado, ningún lustre
abrillanta,
como las flores muertas, marchitas sobre el
suelo,
como al roto cristal, no hay cemento que
pegue.
10
De esta forma se pierde la marchita belleza
a pesar de la ciencia, los afeites y el costo
- XIV
-
¡Feliz, noche y descanso!
Más nada es para mí.
La noche que bendigo aleja mi descanso
llevándome a una cama puesta con todo
lujo,
para que allí discurra sobre mi mala
suerte.
¡Qué sigas bien! me dice
«vuelve pronto mañana»
5
más, bien seguir, quién puede, si ha
cenado dolor.
Sin embargo, al marcharme,
sonríe dulcemente,
con desdén o amistad, no sabría
decirlo,
aunque tal vez le agrade el juego con mi
exilio
o tal vez más le agrade que vague por
allí.
10
«Vagar» palabras hechas a sombras como
yo,
que aún penando o pueden recoger el
botín.
¡Oh, Señor!
Cómo miran mis ojos al Oriente.
Mi corazón se abruma con la espera del
alba,
que ordena a todo el mundo que el descanso se
acaba.
15
Sin que me fíe mucho de lo que ven mis
ojos.
Sentada, Filomena, canta y cuando la escucho
deseo el mismo tono que el canto de la
alondra,
que da la bienvenida al alba
con su canto,
alejando la oscura y somnolienta noche.
20
Cuando se va la noche yo corro hacia mi
amada.
Mi corazón encuentra la esperanza en mis
ojos.
Penar ya es un consuelo y el consuelo
tristeza.
¿Por qué? Porque suspira y dice
¡hasta mañana!
Que las noches con ella se van
rápidamente
25
y ahora los minutos son largos como horas,
aunque a veces se mofan siendo fases de luna.
¡Brilla sol! No por mí, da tu don a
las flores.
Huye noche y que el día, robe parte de
noche
y tú noche sé breve y vuelve a ser
mañana.
30
- XV
-
Era hija de un hidalgo, de tres
la más hermosa
que amaba con su dueño tanto como es
posible.
Mas vio al inglés más bello que
pueden ver los ojos
y cambió su capricho.
Fue tan largo el combate que
amor con amor tuvo
5
que o dejaba a su amor o mataba al gran
noble.
Esta práctica en ambos era un proyecto
duro
para la joven necia.
Mas descartar a uno era su gran
dolor
y que no hubiera forma para ganarse a ambos,
10
pues de los dos el noble fue herido de
desdén.
¡Y ella sin evitarlo!
Salió de aquella lucha
el arte victorioso,
que al obrar el saber, se llevó a la
doncella.
Y el hombre de experiencia le dio gozo a la
dama.
15
Y así acaba mi canto.
- XVI
-
Cierto funesto día vi el
amor
-cuyo mes favorito es el de mayo-
una flor que agitaba su hermosura
jugando con el aire caprichoso.
A través de sus
pétalos el viento,
5
invisible, comienza a buscar paso
y el amante, enfermo ya de muerte
deseaba se hálito del cielo.
«Aire», dijo,
«así quiero triunfar,
como tú, cuando inflas tus mejillas.
10
Pero juré en el nombre de mi mano
no arrancarte jamás de tus espinas,
voto que no procede para el joven
que toma con sus manos la dulzura.
Por ella juraría el
mismo Júpiter
15
que Juno es una negra de Etiopía
y negaría el mismo ser el
Júpiter
con tal de ser mortal y darte amor.»
- XVII
-
No comen mis
rebaños,
no paren mis ovejas,
no corren mis carneros,
y todo es un desorden:
Negativas de amor,
5
reto a la lealtad,
el terco corazón,
de todo esto son causa.
He olvidado las danzas más alegres
y el amor de mi dama se ha perdido.
10
Allí donde su fe y amor reinaban,
hay un «no» bien plantado que no
cambia
y una negra rencilla
me trajo esta miseria.
¡Oh, Fortuna, maldita y caprichosa,
15
ahora veo tu rabia y malhumor!
La inconstancia con más frecuencia en ellas
que en nosotros,