1
Cf. L. A. Sánchez, Nueva historia de la literatura americana, Asunción del Paraguay, Guaranía, 1950, p. 77.
2
Ibid. A. Méndez Plancarte en Poetas Novohispanos (1521-1621), México, UNAM, 1942, I, p. XVI, propende por el año 1581.
3
Primeramente la imprenta sirvió en América para las necesidades de la Iglesia y la administración. Los libros venían de España y a las limitaciones legales obviaba el contrabando. Cf. a este propósito I. A. Leonard, Los libros del Conquistador, México, Fondo de Cultura Económica, 1953 (I.ª ed. inglesa 1949), y La época barroca en el México colonial, México, Fondo de Cultura Económica, 1974. Cf. también A. Peconi, Libri e stampatori italiani nella Nuova Spagna nel secolo XVI, «Quaderni Ibero-americani», 51-52, 1978-79.
4
E. Núñez, Las letras de Italia en el Perú, Lima, Universidad Nacional de S. Marcos, 1968, p. 21.
5
M. Menéndez y Pelayo, Historia de la poesía hispanoamericana, Madrid, CSIC, 1948, II, p. 220.
6
Ibid., p. 226, n. 1.
7
M. Chevalier, L'Arioste en Espagne (1530-1650). Recherches sur l'influence du «Roland furieux», Bordeaux, Féret & Fils, 1966, p. 150.
8
M. Menéndez y Pelayo, ob. cit., II, p. 227, n. 1.
9
J. Ducamin, L'Araucana, poème épique, par D. Alonso de Ercilla y Zúñiga, Morceaux choisis..., París, Garnier, 1900.
10
M. Menéndez y Pelayo, ob. cit., II, p. 227, n. 1.