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D. Basilio Fernández Grande, canónigo de Zamora y antes vicario de Alba y Aliste y párroco de la villa del Pino, con sus anexos Carbajosa y Cerezal, escribió en el mes de Mayo de 1876 la siguiente relación, que obra en mi poder:
«En la villa del Pino, del estado del Excmo. Sr. Marqués de Valdecarzana, en las vicarias de Alba y Aliste, sobre el río Duero, rayano con la villa de Fonfría y lugar del Castro, que es hoy el último pueblo de España á Portugal, se hallaron unas lápidas gruesas, como de media cuarta, largas como de dos varas las dos y otra de vara y media y algo menos de ancho, y tenían las inscripciones siguientes:
D
. . . . M
. . . . . DOMINVS == FROCILVS ET ==
MAXIMINA == AURELIO == FILIO CARISSIMO == MEMORIA == . XXIII. |
Lado 1.º | Lado 2.º |
D . M. | D . M |
P R O C V L O | M A X I M I N E |
En otra lápida se lee lo siguiente:
IOVI. ONO. . . . .
. EL. . . . GVISIE == RI FAN. I. . . . . . . . . G |
Otra:
D. O. M. |
CALFVRNIVS S
RIS EL REBVRIMA CALEVRNI FILIAE CARISSIMAE - MEMORIA AN. XIIX. |
La inscripción que sigue está en una lápida que se ve en el pavimento de la ermita de San Esteban, junto al Duero, por bajo de lo que llaman Arribas:
IOVI, ONO - MAC EL == GVISIE - ARCO F RI - FANL - G: L |
Todas las piedras son de un jaspe blando y de buen lustre: dicen los naturales haberlas bajado á la ermita de San Esteban de otra derruída, llamada antes San Gil, que en lo antiguo pudo ser torre sobre un elevado picacho, donde se reconocen aún ruinas de mucha antigüedad. Las piedras pudieron conducirse de mucha distancia, acaso del reino de León, porque en las cercanías no hay tal clase de mármoles.
Bajo las ruinas de esa perecida torre se han hallado muchas medallas, algunas de plata. Las cuatro siguientes se distinguen muy poco:
La primera tiene en el anverso una cabeza de perfil; no se percibe si está laureada, y por el letrero se sabe que es de Tiberio, pues dice así: TIAVGVS - DIVI AVGVSTI - FIL..... además tiene un sobresello con dos letras, de que solo se percibe una R, —79→ que es la última. En el reverso hay un toro y encima tiene este letrero: FVSPARSO y debajo SVRNI y algunas letras más que no se distinguen: mas basta esto para saberse el tiempo de que es la medalla, porque el emperador Tiberio gobernó desde el año 14 de Jesucristo hasta el 37, y así corresponde al siglo I. Estos dos personajes, Falvio Sparso y Stauriano, pudieron ser duunviros de la ciudad donde se batió esta moneda, pues bajo la cabeza de la res se perciben señales de letras, donde, como en la siguiente, debía estar la cifra con que se declaraba este magistrado.
La segunda tiene en el anverso un rostro de persona joven y en la cabeza corona de laurel. El letrero no está muy legible, pero se distingue lo siguiente: CES. M. AVR. SEV. ALEXANDER. AV G. Este emperador floreció desde el 222 hasta el 235 de Jesucristo. El reverso una figura de doncella que representa la paz.
La tercera tiene en el anverso una cabeza sencilla, sin corona; á un lado tiene AVGVS. En el reverso un buey solo, y sobre él se lee L. COR. IER (Lucio Cornelio) y debajo M. IVNHISP., que parece quiere decir Marco Junio Hisp. y á un lado la cifra II. VIR, que denota haber sido duunviros.
La cuarta tiene en el anverso una cabeza y del letrero solo puede leerse AVGVSET MFV..... En el reverso un circulo de flores y en el centro dos renglones y no se leen más que los finales; el primero podía ser de cuatro letras, siendo las dos últimas G O; el de abajo remata en G A, y podía tener antes otras dos letras.»
Esta copia procede de los manuscritos de D. Antonio Piñuela83. Los describí en mis Memorias históricas de la ciudad de Zamora, su provincia y su obispado, tomo I, pág. 32 y 33.
CESÁREO FERNÁNDEZ-DURO.
Madrid 14 Noviembre 1881.
—80→Las cuatro monedas imperiales que describió el Sr. Fernández Grande, son harto conocidas y nada ofrecen de particular. El Augusto (3.ª) fué acuñado en Celsa y los Tiberios (1.ª y 4.ª) en Calagurris y Segóbriga.
Mayor interés encierran los textos lapidarios. Dan nueva luz y muy notables variantes á los de Hübner (2613-2616) tomados de Masdeu, quien los sacó de una Relación que le hizo D. Manuel Arias, cinco años menos antigua que la del Sr. Fernández Grande. Para conciliar varios extremos contradictorios y fijar decididamente la lectura de los epígrafes, convendría solicitar de la Comisión de monumentos históricos y artísticos de Zamora calcos, ó fotografías, ó por lo menos buenos dibujos de las piedras originales. Por de pronto, dos hechos históricos de alguna importancia, que dejó en la oscuridad Masdeu y no ha podido consignar Hübner, se desprenden del papel que nos comunica el Sr. Fernández-Duro. Tales son el material y dimensiones de las lápidas y el primer sitio de donde partieron. Éste, ó el foco de población romana, se ha de buscar en la torre antiquísima que fué ermita de San Gil84, en cuyos escombros, dignísimos de exploración, yacen por ventura preseas arqueológicas de gran precio85.
—81→Provisionalmente restauro é interpreto (Hübner, 2616):
D · M | D · M | D · M |
PROCVLO | DOMITIVS | MAXIMINE |
PROCVLVSET | ||
MAXIMINA | ||
AVRELIO | ||
FILIOCA | ||
RISSIMO | ||
MEMORIA | ||
· XXIII |
A los dioses Manes. Domicio Próculo y Maximina pusieron esta memoria á su carísimo hijo Aurelio, fallecido á la edad de 23 años.
A los dioses Manes. A Próculo.
A los dioses Manes. A Maximina.
De otro Domicio Próculo queda recuerdo86 en Iglesuela del Cid, villa del partido de Castellote, provincia de Teruel:
D · M · S |
M · D · PROCVLVS |
AN · XVII · H · S · E |
M · D · SERANVS · PA |
TER · FILIO · PIISSIMO |
FECIT · ET · SIBI · |
2. (Hübn. 2613.) Este epígrafe es la primera parte del 4.
3. (Hübn. 2614):
—82→
D · O · M |
CALPVRNIVS |
SERIVS · ET |
REBVRINA CAL |
PVRNI FILIAE |
CARISSIMAE |
MEMORIA |
A N · XIIX |
A los dioses Manes. Calpurnio Severino y Reburina pusieron esta memoria á su carísima hija Calpurnia, fallecida á la edad de 48 años.
En la primera línea señala Hübner con una o (minúscula) la figura de la corona fúnebre, entre la D y la M. Yo la he visto tal como la exhibe el Sr. Fernández Grande para la inscripción presente, en otra de León87, que publiqué años ha88.
No es menos digno de atención, que en virtud de expresarse el nombre y el cognomen del padre (Calpurnius Severinus), milita fuerte razón para incluir en la inscripción 1 el nombre de Domitius que omitieron Hübner y Masdeu, y transformó el Sr. Fernández Grande en Dominus.
4. (Parte 2ª, Hubn. 2615):
IOVI · ONO | MAC |
EL · GVISIE | ARCO · F |
RI · F · AN · L | AN · L |
Joviono Elguisieri f(iliae) an(norum L. - M(arco) Ac(ilio) Arco(nis) f(ilio) ann(orum) L.
A Joviona, hija de Elguisiero, de edad de 50 años. A Marco Acilio, hijo de Arcón, de edad de 50 años.
—83→No poco interesa esta doble inscripción al estudio de las lenguas vaccea y lusitana. Joviono fué probablemente mujer de Acilio; ni hay que extrañar la desinencia en o, porque no se os oculta la muy larga lista de los nombres celto-hispanos análogos, como Ranto, Vaenico y otros femeninos. Está por Joviana, así como Juliona por Juliana, en la inscripción británica de Chesterhope cerca de Risingham89. Semejante cambio fonético en o de a (larga) seguida de n, quizá provenga del timbre oscuro y seminasal, que no solamente el idioma portugués, sino también el gallego de la región del Miño90 heredó y guarda como resabio orgánico é indicio seguro del galo-céltico91, contrapuesto á la claridad y limpieza del vascuence92.
Tropezó Masdeu en el punto ortográfico de
I O V I · O N O
é imaginó cierta dedicación al rey de los dioses; mas en lápidas populares, como lo es esta funeral, el grabador, ó cuadratario, no se paraba en barras; y más de una vez marcaba los puntos de intersección á manera de suspiros entre sílaba y sílaba del nombre del finado93. Buena prueba de ello se ve en la línea siguiente, donde un punto separa de las restantes la primera sílaba del genitivo Elguisieri, que Hübner, no sin razón, ha relacionado con el nominativo masculino Elguismio de la inscripción de Villalba, realmente votiva y también dúplice (3061, 3062), hoy poseída por el Museo Arqueológico Nacional. Hübner va más allá, entendiendo94 —84→ que la copia que disfrutó Masdeu debe rectificarse por la inscripción de Villalba y que hay que poner Elguismi donde dice Elguisieri. Sin embargo, á buen librar, no nos cumple aceptar la corrección, á menos que la demuestro el calco, ó la inspección del original; y esto por dos razones. En primer lugar, porque el escrito del Sr. Fernández Grande, testigo fidedigno, está conteste con el que el Sr. Arias transmitió á Masdeu; y en segundo lugar, porque la forma del nombre en cuestión, que retengo, se armoniza con otras de otros indígenas indubitables, como Baesisceris (3221) en Oreto, Tannepaeseris95, en Obarra, Tannegiscerris (3794) en Liria, y en Pinos Puente Tascaseceris (2067). Sin ir tan lejos, y sin salirnos de las cercanías del Pino, entre las muchas inscripciones lusitanas recien halladas por el Sr. Garnacho en Moral, lugar y Ayuntamiento de esta parte del Duero y notificadas á Hübner por D. Aureliano Fernández-Guerra, se nos viene á las manos la siguiente (2618) muy expresiva:
D
· M
C V N I I
R O L I I
V
C I E S E R I
I LV I
I
D(is) M(anibus). Cunero Leucieseri [f(ilio)?] ann(orum) LVII.
Las raíces, así del primer nombre como del segundo, se distinguen claramente en los que cita Zeuss96: Cunetio, Cunobilinus, Cunotamus, Leucetios. Las terminaciones aformativas iscer, iscerr, eser, sobredichas, no me parecen deber explicarse por la latina ster, como en surdaster, poetaster, sino por el fondo arcano de nuestros antiguos idiomas indígenas que se ocultan en los epígrafes de metal ó de piedra trazados con letras ibéricas.
FIDEL FITA.
Madrid, 9 Enero, 1885.