Selecciona una palabra y presiona la tecla d para obtener su definición.

  —[88]→     —89→  

¡Salgan y lleguen en buen hora,
dominando los elementos
las velas que el marino adora,
y los steamers humeantes
que conducen los alimentos.  735
la carga de los fabricantes,
los ejércitos de emigrantes,
el designio, el brazo que va
a arar, sembrar y producir
en el latifundio, en el pago,  740
partan las naves de Cartago
y arriben las naves de Ofir!
¡Y bien se escuche en las funciones
de conmemoración el trueno
de las salvas de los cañones  745
del mar conmoviendo el estuario
de hímnicas vibraciones lleno
en la fiesta del Centenario!
—90→

¡Gloria a América prepotente!
Su alto destino se siente  750
por la continental balanza
que tiene por fiel el istmo:
los dos platos del continente
ponen su caudal de esperanza
ante el gran Dios sobre el abismo.  755
¿Y por quién sino por tu gloria,
oh, Libertad, tanto prodigio?
Águila, Sol y Gorro Frigio
llenan la americana historia.
Y en lo infinito ha resonado,  760
júbilo de la humanidad,
repetido el grito sagrado:
¡Libertad! ¡Libertad! ¡Libertad!
Antes que Ceres fue Mavorte
el triunfador continental.  765
—91→
Sangre bebió el suelo del Norte
como el suelo Meridional.
Tal a los siglos fue preciso.
Para ir hacia lo venidero,
para hacer, si no el paraíso,  770
la casa feliz del obrero
en la plenitud ciudadana,
vínculo íntimo eslabona
e ímpetu exterior hermana
a la raza anglo-sajona  775
con la latino-americana.
Proles múltiples, muchedumbres,
tupidas colmenas de hombres,
transformadoras de costumbres,
con vosotras está la suma  780
de fuerza en que América finca;
fuisteis presentidas del inca;
os adivinó Moctezuma.
En este día supremo:
¡Excelsior! se oye en un extremo;  785
—92→
en el otro se oye ¡Adelante!
¡Glorificado el instante
en que resurge Triptolemo!
América que la dicha encierra
vivirá del sol y la tierra;  790
y hoy la tierra, pánico incensario
encendido por el destino,
perfuma el día argentino
en la fiesta del Centenario.

  —93→  

Ilustración

  —[94]→     —95→  

A las evocaciones clásicas  795
despiertan los dioses autóctonos,
los de los altares pretéritos
de Copán, Palenque, Tihuanaco,
por donde quizá pasaran
en lo lejano de tiempos  800
y epopeyas Pan y Baco.
Y en lo primordial poético
todo lo posible épico,
todo lo mítico posible
de mahabaratas y génesis,  805
lo fabuloso y lo terrible
que está en lo ilimitado y quieto
del impenetrable secreto.
—96→

Cantaré la Paz sobre todo.
Huya el Demonio perverso,  810
huya el Demonio beodo
que incendia en mal el universo,
desaparezcan las furias
que con sangre de los ejércitos
empurpuraron las centurias;  815
que no más rujan los tigres
marciales sino de alegría,
y que a la Paz se alce un templo
como aquel que dando un ejemplo
insigne Augusto romano  820
ordenara elevar un día.
El industrioso ciudadano
el ramo de olivo venere:
que tenga sus armas listas,
no para inhumanas conquistas,  825
—97→
mas para defender su tierra
donde por la patria se muere.
¡Guerra, pues, tan sólo a la guerra!
Paz, para que el pensamiento
domine el globo, y vaya luego,  830
cual bíblico carro de fuego,
de firmamento en firmamento.
¡Paz para los creadores,
descubridores, inventores,
rebuscadores de verdad;  835
paz a los poetas de Dios,
paz a los activos y a los
hombres de buena voluntad!
En paz la hora renaciente,
continua y poliformemente,  840
el movimiento y no la inercia,
legiones dueñas de sus actos,
gente que osa, que comercia,
multiplica los artefactos,
combate la escasez, la negra  845
—98→
miseria, y pasa sus revistas
a las usinas y talleres;
y sus horas áureas alegra
con la invención de los artistas
y la beldad de las mujeres.  850
¿A qué los crueles filósofos?
¿A qué los falsos crisóstomos
de la inquina y de la blasfemia?
¡Al pueblo que busca ideal
ofrezca una nueva academia  855
sus enseñanzas contra el mal,
su filosofía de luz;
que no más el odio emponzoñe,
y un ramaje de paz retoñe
del madero de la Cruz!  860

  —[99]→  

Ilustración

  —[100]→     —101→  

¡Argentina! el cantor ha oteado
desde la alta región tu futuro.
Y vio en lo inmemorial del pasado
las metrópolis reinas que fueron,
las que por Dios malditas cayeron  865
en instante pestífero; el muro
que crujió remordido de llamas
la hervorosa Persépolis, Tiro,
la imperial Babilonia que aun brama,
y las urbes que vieron a Ciro,  870
a Alejandro, y a todos los fuertes
que escoltaron victorias y muertes.
Y miró a Bizancio y a Atenas,
y a la que, domadora del mundo
siendo Lupa indomable, fue Roma.  875
Y vio tronos, suplicios, cadenas,
y con tiaras a tigres y hienas,
—102→
y cien más capitales precitas
donde el hombre fue ciego a la vasta
Libertad, donde fueron escritas  880
terroríficas y duras leyes,
contra tribus y pueblos y casta,
o las leyes fueron voluntades;
y a través de tragedias y gestas
derrumbáronse tronos y reyes,  885
o se hicieron cenizas ciudades
por ensalmos de frases funestas.
Y después otros siglos y luchas,
otra vez lo que arrasa y escombra,
muchos reinos que surgen y muchas  890
vanidades que caen en la sombra
infinita. Mane, Thecel, Phares.
Y el poeta miró un astro eterno
sobre ruinas y tierras y mares,
que alumbraba con su claridad  895
nuevos cultos, cultura y gobierno
y a su brillo quedó deslumbrado:
—103→
era el astro de la Libertad.
Argentinos, la inmortal estrella
a vosotros simbólica es Sol:  900
las naciones son grandes por ella:
lo sabía el abuelo español.
Dad a todas las almas abrigo,
sed nación de naciones hermana,
convidad a la fiesta del trigo,  905
al domingo del lino y la lana,
thanks-giving, yon kipour, romería,
la confraternidad de destinos,
la confraternidad de oraciones,
la confraternidad de canciones,  910
bajo los colores argentinos!

  —[104-105]→  

Ilustración

  —[106]→     —107→  

Argentina, el día en que te vistes
de gala, en que brillan tus calles
y no hay aspectos ni almas tristes
en alturas, pampas y valles;  915
el día en que desde tus fuertes,
tus cruceros y tus cuarteles
salvas lanzas, músicas viertes
entre las palmas y laureles,
visitada por los príncipes  920
de reinos y tierras lejanas
y mensajeros de repúblicas,
son las patrias americanas
las que más comparten tu júbilo.
Son las próximas hermanas  925
las que te proclaman primera
en el decoro familial,
después de heroica y guerrera,
—108→
hospitalaria y maternal.
Argentina tiarada de ónice  930
y de mármol, se puede ver
cuál luce sobre tu frente
el diamante refulgente
de las alturas, Lucifer:
pues eres la aurora de América.  935
Magnificase tu apoteosis,
regazo de múltiples climas,
preferida del nuevo siglo,
y en sus cláusulas y en sus rimas
te profetizan tus profetas  940
y te poetizan tus poetas.
Crece el tesoro año por año
mientras prosigues las tareas
de las por Dios suspendidas
civilizaciones de antaño;  945
encarnas, produces, creas
cerebro para otras ideas,
útero para nuevas vidas.
—109→
Tus hijos llevarán en sí
por su sangre el hierro y rubí  950
de los cuatro puntos del globo.
Concentración de los varones
de vedas, biblias y coranes,
en el colmo de sus afanes,
en el logro de sus acciones,  955
tu floración de floraciones
tendrá un perfume latino.
En el primitivo crisol
Roma influyó en tu destino,
cuando a través del español  960
puso su enérgico metal.
Y sus históricas llamas
animarán genios y famas
al argentino Arco Triunfal.
—110→

¡Yo, por fin, qué he de decirte  965
en voto cordial, Argentina!
Que tu bajel no encuentre sirte,
que sea inexhausta tu mina,
inacabables tus rebaños
y que los pueblos extraños  970
coman el pan de tu harina.
¡Cómalo yo en postreros años
de mi carrera peregrina,
sintiendo las brisas del Plata!
Que libre de hambre y pestes  975
por tus tesoros y tu ciencia,
jamás enemigas huestes
te combatan. Tu preeminencia
sea siempre mayor, y homérica
voz de tu genio viril  980
por ti diga el triunfo de América.
—111→
mi inspiradora, alumna
del Musagetes, al viento
las alas, mi pensamiento
florido da a la columna,  985
riega junto al monumento;
y en lo solemne del coro
del himno, el acento canoro
une mi amor y mi acento:
¡Argentina tu día ha llegado!  990
¡Buenos Aires, amada ciudad,
el Pegaso de estrellas herrado
sobre ti vuela en vuelo inspirado!
Oíd, mortales, el grito sagrado:
¡Libertad! ¡Libertad! ¡Libertad!  995

  —[112]→  

Ilustración