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Octubre 1929. Santiago

Hijo mío:

Mal papel el de turba-fiesta. Acepto serlo antes que recibir de ti el cargo de no prevenirte de las grandes desgracias, de las irreparables: Manuelita, tu esposa, está gravemente enferma. Hace tiempo los médicos no le permiten levantarse ni caminar por el estado de su corazón.

Ya te veo diciendo: «Pobre mi mamacita las cosas que inventa para obligarme a volver». Puedes no sólo decirlo sino hasta pensarlo, yo te lo aviso y descargo mi responsabilidad. Sé, tienes espíritu de contradicción y esta noticia no hará sino reforzarte en tu resolución. ¡Qué hemos de hacerle! Yo por lo menos cumplo con mi deber y con mi anhelo de ahorrarte remordimientos y grandes penas: tienes tu consciencia de caballero y de hombre de corazón, eres mayor de edad ¿Qué más? Supongo te darás cuenta de que esta vida se está apagando ahogada en su silencio y tragándose noblemente toda la hiel de su inmerecido destino.

No sé lo que sucede en su interior, a ella hay que adivinarla. Jamás me ha hablado una palabra sobre el estado de su espíritu, pero, tendría que ser muy cerrada para no ver el drama que la va minando. Aseguraría te quiere como siempre, su temple de alma no es de los que cambian: lo que hay es, que sabe sufrir y no busca la compasión.

Por los demás no hay novedad en la familia: todos sufrimos de tu desvío, todos te quieren: tienes la puerta abierta, puedes resolver con plena libertad. Tus hijos te recuerdan y te esperan en todo momento: «Cuando llegue mi palacio...» es su frase habitual, especialmente de Cacó, cuya personita se desarrolla en una hermosura ideal. Luego hará su Primera Comunión, sabe leer, escribe y dice cosas muy lindas.

¡Perder toda esta felicidad, única verdadera, tan sólo por un capricho necio!

En fin hijo de mi alma, no digas que esta carta no ha llegado a tus manos: quiero dejar constancia de que tu madre vela siempre por ti y vive para ti y espera verte hombre fuerte, de consciencia y caballero como te soñó. Estás obligado a sostenerla.

Acabo de leer un artículo en el Diccionario Histórico Bibliográfico, sobre ti. Está a mi gusto, concluye así: «Vive en París en unión de su esposa, Doña Manuela Portales Bello». No te lo mando porque es un tomo demasiado voluminoso y además viene una biografía demasiado alabanciosa mía. Tu serías capaz de reírte porque la Carmen Rosa no da para biografías.

Que la Santísima Virgen te guarde. Te besa tu madre que te adora.

Te mando la dirección de tu casa por si quieres escribirle a tus hijos: Dieciocho 207.

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19 junio -1930- Santiago de Chile

Hijito mío de mi alma:

Todo el mundo habla por teléfono con París. ¿Por qué tu madre no ha de poder oír tu voz adorada? Dime cuándo deseas tener comunicación conmigo y cada cuanto tiempo. Así se me hará menos dolorosa esta separación que es el dolor de mi vida. No te hagas desentendido, ni digas que mis cartas se pierden, pues eso no sucede sino con las que van para ti, por consiguiente existe alguna interrupción desconocida. Cuando se pierde un avión inmediatamente sale en todos los diarios v. gr., el de la semana pasada en que también te escribí y por eso repito mi carta. Tu tío Ismael dice que el correo aéreo es el único que le llega con toda puntualidad. Hazme el favor de participarle la muerte de tu tía Concha acaecida el viernes pasado de bronconeumonía.

Y ya que de muertos se habla hazme otro favor y es el de dar a mi nombre el pésame a la niña Petit de Vargas por su padre: Yo ignoro su dirección.

Las direcciones que me pides son: Juan Guzmán Cruchaga77, Bulnes 86; Patricio Vicuña, calle Vicuña Subercaseaux.

Nada me explicas sobre tu malestar. Yo quiero saber todo lo que te pasa niño mío adorado. Quiero que vayas a ese sanatorio que te indica tu amigo médico y si te falta dinero me lo pides ¿No sabes todavía lo que eres para mí? ¿No sabes que tu vida es la mía y que si no fuera por que llevo la Fe hasta en la médula de los huesos ya me habría muerto de pena? ¡Ay hijo de mi alma, la confianza que tengo en la protección de la Santísima Virgen me sostiene. Cuántas veces te he dicho te entregué a Ella desde antes de nacer! Ella fue la que me concedió el talento tuyo, ¿por qué me iba a negar que lo aprovecharas en dar gloria a Dios? y también en verte a mi lado.

En mi anterior a la que acaba de perderse te pedía escribieras para mí, dedicada a mí, la vida de Francisco de Asís La hazaña más enorme que registra aquella época. Yo querría correr con los gastos: ¡no me niegues este regalo! Dame esa prueba de que no te soy indiferente. Me hablas de un libro nuevo: Cristóbal Colón y no me lo mandas ¿Quién lo creería? El Mío Cid está sobre mi velador junto con la Sagrada Escritura para no dejar de saborearlo y verte pintado en él a cada gesto heroico y salvaje y real. A pesar de que tú dices no dar precio a la sangre... ¡qué papa tan grande! Tú eres profundamente aristócrata y siempre desde niño has necesitado tener tu corte. Los vasallos te han sido infieles por falta de raza lo cual no quita tengas tu trono y; ¡muera quien no piensa como pienso yo, pero con el culto de la libertad!... ¡Ay, mi niño cuándo dejarás de ser tan rebelde, para que ocupes el sitio que te corresponde entre los cuerdos, los sinceros como tú, los   —95→   buenos, los que buscan la luz, los que se arrancan del error que no es sino una forma caprichosa de rebeldía! ¿Cómo no va a estar herido tu sistema nervioso cuando estás fuera de tu ambiente?, ¡del ambiente de verdad, que es el que te exige tu alma que fue creada para destinos altísimos y que va caminando a tientas porque sí!

Conocí a un sabio de verdad, de esos que tu no podrías dejar callado como a los vulgares que has tratado hasta ahora, se Rama el Padre Laburi, es médico, biólogo y de llapa gran orador, está en íntima relación con todos los sabios europeos y con ellos ha realizado sus trabajos. Suele ir a París y le he pedido te vaya a ver. A mi vez te pido lo veas si vas a España. Creo será el único hombre en el mundo que te deje satisfecho. Aquí tiene enloquecido al cuerpo médico por su ciencia. El sectario Sierra y toda su camarilla masónica no le pierden conferencia. Todo el pedagógico asiste y aplaude. Espero no des tu opinión personal. Te advierto que no habla de temas religiosos si no se lo piden. Es muy joven, 42 años y modesto hasta hacerse nadie.

Creó que en el próximo correo te mandaré mi novela para que le des a leer a tu conciencia y a Mad Anthoni.

Tus hijitas crecen en perfección. Cacó entra al oratorio y con sus manitas juntas pide a Jesús le devuelva a su palacio. Cada día avanza más y más en el arte teatral. ¡Ahora estudia muy escondida una pieza hecha por Vicentito Yrarrázaval que es el romántico de la casa!

Marie Louise se encontró con que la mamita no le tenía dulces ¡a la vista se entiende! y tomando frases de sus comedias me dijo: «Mamita, pan para hoy y hambre para mañana» ¡Fue tan oportuna que le di muchos besos y muchos dulces!

La comedia Yrarrázaval me la darán el 21. En la última Cacó hizo una maravillosa marquesita de Casa-Real.

Los asuntos del marquesado van bien. José Antonio está resuelto a no perder el pleito. Está muy agradecido conmigo por mi artículo sobre su padre que ha sido aplaudido.

Adiós mi niño mío de mi alma, el más querido y el más ingrato. ¡Esa es la vida! Espero y esperaré con el favor de Dios darte algún día el abrazo que ahora te mando con toda el alma tu

Madre

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30 de junio -1930- Santiago de Chile

Hijo mío de mi alma:

¡No quieras martirizarme sin cuidarte! ¡Qué sería de mí sin ti! ¡Oh! yo me volvería loca. Perderte para siempre, a ti que eres lo que más quiero en el mundo. Cuídate hijo adorado, haz todo lo que sea necesario para sanar. Sólo tu pobre madre puede cuidarte como necesitas. ¡Vente a Buenos Aires, allí te puedo ir a ver cada vez que quiera! Y tú puedes ver a tus hijitas que te adoran.

¡Cuando recibí tu última les leí lo que decías para ellas y se tragaban esos renglones con inmensa ternura!

¿Qué tiene mi palacio?, ¡me preguntaban en coro con ese interés que no se puede fingir! No pierdas lo mejor de tu vida lejos de lo único que te puede satisfacer: de lo que da alegría sana que es el hogar, la formación de almas, la herencia de ti mismo que sólo tú puedes darles.

¡Qué me oiga la Santísima Virgen y cómo podría abandonarme cuando eres suyo y Ella no desampara jamás! Pídele un milagro, pídele lo que más desees, a fin, de probar su maternidad para contigo. Te prometo que te escuchará siempre que se lo pidas con todo tu corazón.

Ese estado nervioso que sientes es el llamado de los tuyos, hijito mío. Es la voz de Ella que te hace vivir en el amor, en el pensamiento de los tuyos que ni un solo instante han disminuido su amor por ti. ¡Niño mío adorado! Piensa en tu madre también. ¿Qué te he hecho yo para merecer de ti este martirio de tu ausencia? ¡Yo quiero verte! ¡Yo quiero que estés sano! ¡Yo quiero darte alegría! ¡No me cierres todos los caminos! ¡No me hagas imposible realizar el único ideal de mi vejez: verte, sentirte... saber que en el tiempo y en la eternidad estaremos juntos! ¡Cuando el Señor me llame, tener la seguridad de que allá nos volveremos a reunir! Qué empecinamiento por martirizarse, niño mío de mi alma, el tuyo, tú con tu voluntad puedes vencer todos los obstáculos: así lo has probado ¿Por qué entonces no volver sobre tus pasos y poseer la verdadera dicha? ¿Por qué cerrar los ojos a la verdad y no buscarla? ¿Qué te ha hecho Cristo para que no lo ames? Lo mismo que he hecho yo: ¡darte amor! ¿Qué te han hecho tus hijos para que los condenes a no dormirse en tus brazos, a no recibir tus consejos, a carecer de tus besos? ¡Ay! Hijito mío: todas las puertas de los corazones te están esperando abiertas ¿Qué esperas? Quieres sufrir más de lo que sufres con esta separación. ¡No seas cruel contigo! Tente lástima niño mío.

No rabies con mis palabras. Te las mando con todos mis besos. ¡Quisiera anestesiar tus penas con la seguridad de que tienes en tu mano el remedio! ¡Que en el momento que quieras   —97→   puedes volver al nido donde todo te pertenece, en que puedes sacar lágrimas y hacer que florezca la felicidad! ¡Sólo en el infierno no hay esperanza y tú eres de la Santísima Virgen y mío!

¡En mi anterior enviada por avión a París, te digo que nos pongamos de acuerdo para hablar por teléfono ya que se ha hecho posible oír tu voz adorada, niño de mi corazón! ¡Así hablaremos de cuando en cuando para amortiguar mi ansiedad! ¡No es posible que no viva con un abismo de silencio entre tú y yo!

También te digo que cuando vayas a España busques al padre Laburi, el enorme sabio biólogo, médico y todo lo que se relaciona con los problemas que a ti te interesan como hombre de talento. Aquí ha enloquecido al público: Quezada Acharán78 el doctor Sierra y los caporales de la masonería no le han perdido conferencia. Les ha dado especiales al cuerpo médico y todos han salido asombrados declarando que en ninguna parte del mundo han oído hombre más sabio.

Tiene muchos deseos de conocerte: le regalé tu libro que lo leerá durante el viaje y con él te enviaré el mío y retratos de los chicos. Por si va a París le di tu dirección. Mañana se va a Concepción llamado por Enrique Molina79 para que dé dos conferencias en aquella Universidad. Me hace el efecto de la pasada de un astro por esta oscuridad chilena.

Pero, si quiere vernos dar un paso adelante y es: el deseo de adelantar... ¡aunque la mayoría quede en ayunas!

Habla en términos que jamás habrán oído: paranoicos, somáticos, etc., etc. Yo por lo menos llegaba al auto a sacarme el sombrero, porque la cabeza me estalla de deseos de entenderlo todo. ¡Qué falta me hace mi sabio mío, el que Dios me hizo! ¡Qué soledad del espíritu de la mente sin mi niño adorado! sin sus arranques, sin sus rabietas, sin sus disparates discurridos pour eppatè les bourgois.

Hoy he pasado el día rodeada de tus hijos y demás nietos. Piensa que tu Marie Louise, me dijo: «Mamita hagamos una comedia para el domingo». Entonces Cacó, dio su alarma: «Ella tiene una escrita, pídasela mamita: es preciosa, yo haré el papel de Francisca y ella de abuelita».

Tu comprenderás cómo me encantó la cosa, le pedí me la diera a conocer y yo misma se la saqué en limpio. Verdaderamente es maravillosa para una niñita de su edad; qué frases, qué oportunidad, qué gracia. A la abuela la llama doña Purificación; a un viejo amigo de la casa don Eulisio: el sirviente Timoteo, etc. ¿No encuentras extraordinaria la comprensión, el sentido tan acertado de los nombres, los valores que encierran? Primero es la tragedia, el terremoto, y después, con maestría concluye molesta de tanto tema pavoroso contando cuentos alemanes almacenados en su cerebro. Cacó ponía sus frases en los diálogos con ese talento que Dios le ha dado tan superior. A esa le gusta abreviar.

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«Ya es tiempo que caiga el telón, mamita. Esta María Louise, como tiene buena memoria habla demasiado largo».

¡Chiquillos míos encantadores! ¡Sólo por amor a ti me separaría de ellos, sí mi hijito adorado, que se vayan a alegrar tu vida, a sanar tu neurastenia cansada por ellos, sin quererlo! ¡Angelito mío! Y mientras arregla su teatro subterráneo, los golpes de luz que deben caer sobre los actores, los tapices de fondos en compañía de los otros dos empresarios Raf y Vicho. Y la Manola, con Jorge en su idilio que ha crecido con ellos. Dios y la Santísima Virgen los bendigan y a ti mi Vicente mío... mi niño el más querido.

Recibe en pleno corazón mis abrazos, mis besos que te envío con toda el alma.

Tu Madre

Los más finos recuerdos para Roberto Suárez80, a quien agradezco con toda el alma ese baño de afección con que te refresca el espíritu ¡Dios se lo pagará!

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14 julio -1930. Santiago de Chile

Hijito mío de mi alma:

Vengo de saber que Juan Guzmán no está en Santiago sino en Bahía Blanca, Rep. Argentina. Su dirección es ésa, nada más.

¿Cómo te sientes niño mío adorado? ¡Mi corazón está a tu lado siempre! ¡Siempre pidiendo a la Santísima Virgen te mantenga bueno, te acerque a mi de modo de poderte ver, sentir tus besos y reventarte en mis brazos!

¡Qué se puede querer tanto!...

Entregué a Manuelita tu carta el mismo día que la recibí a fin de no demorarle un rato de esperanza. Nada me ha dicho: es tan reservada y sobre todo conmigo. Tal vez tiene razón; yo sería Juez demasiado parcial tratándose de mi niño.

Si tú le escribieras sería el mejor modo de conocer el estado de su alma. Yo creo conocerlo, creo que en nada ha disminuido su cariño. ¡No hay más que mirarla! Pero, si le escribieras le harías mucho bien. Yo sé que ha tenido cartas escritas para ti, y que su dignidad de mujer profundamente humillada y herida la ha detenido. Si tú dieras el primer paso -y así debe ser- te pondrías como caballero a la altura de su pena; darías ocasión a reconciliarse. ¡Hazlo hijito mío! no te pesará.

Todos los pinchazos que me mandas en tus cartas, me entretienen: ¡eres el mismo enfant terrible de siempre! ¡Sin ellos no serias tú!

Tus niños, míos, están bien. Cacó, me mostró una cartera misteriosa: «Ábrala», me ordenó. Quería viera un retratito tuyo pegado en su cuadernito de apuntes. Me lo acercó a los labios para que lo besara y después te besó ella ¡imposible no te llegará el sabor, la devoción de su cariño! ¡Hijito mío!

Nada más por hoy. Hace mucho frío y yo estoy enferma, en cama -poca cosa-.

¡Cuídate mi niño adorado! Pon el oído a la voz de tu Madre del cielo y a esta otra que te envía todo lo más tierno del corazón y del alma en un beso

Tu Madre

Saludos afectuosos para Roberto a quien envidio porque está contigo.

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Agosto -1930- Santiago.

Hijo de mi alma:

Van las mil liras para tu gira por los senderos de Asís. ¡Que él, el santo del amor y de la mansedumbre de Cristo, te dé el abrazo fraternal con que abrazó todo humano dolor!

Porque tú, mi niño, eres un herido de la vida que erraste el sendero ¿Cuándo? ¡Pregúntaselo a tu héroe, él te recogerá en el abrazo infinito en que recogió los dolores de todo ser sensible en la creación!

¡Que él te haga sentir las delicias del amor a Cristo, del dolor y de la felicidad en Él! La vida humana es un sendero espinoso. Cuando vamos más seguros de nosotros mismos es cuando más honda sentimos la clavadura! Porque es inútil pensar que en el gesto de la risa está la alegría. ¡La alegría verdadera, es decir, la única que nos es dada experimentar está en el goce de sentirnos puros, de haber consolado algún dolor; de creernos capaces de repartir alegría!

¡Hijo de mi alma, quién pudiera transmitir a la juventud la experiencia de la vejez! ¡El amor! Cuando es el engranar de dos almas, es la felicidad -porque sólo en el amor hay felicidad digna de llamarse- sea el amor de los padres a sus hijos, sea el de dos almas hermanas que tuvieron la suerte de encontrarse, etc. Y cuando no existe el alma hermana entonces se busca en las alturas el ideal, y no en la negación del bien, que es el desconocimiento de la vida futura.

Un minuto de luz, decide de nuestro porvenir eterno. ¡Eternamente feliz, o eternamente desgraciado! ¡Hay que pensar! ¡Hay que escoger y decidirse!

Espero que mi libro esté en tus manos, mi niño adorado, no lleva pretensiones, a no ser, el que sea tu hermana mongeríatica. Mírala con comparación y con ternura: es tuya.

¡Adiós niño de mi alma! Saludos afectuosos a Roberto y para ti el amor infinito de tu

Madre

Todos los niños bien, gracias a DIOS.

«Ya se le va pasando la pena al poeta enamorado.

Ahora anda para arriba y para abajo con una nieta de Rockeffeler. De una princesa italiana con que andaba antes se ha pasado a una princesa del dólar, además tiene de querida oficial a la Jaqueline Chally premio de belleza de Francia.

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El precioso se quiere hacer el extravagante se presenta en los teatros de smoking y con bufanda de seda colorada, usa corbatas de cuero y de terciopelo y como hay cuatro tontas que le celebran todo ya no sabe que inventar.

A veces se encierra una semana y no quiere ver a nadie. Sus amigos dicen que es porque está muy triste, yo creo que es porque se pega sus monitas de cocaína.»

En el momento de cerrar mi carta recibo de París este anónimo que te remito en prueba de que jamás te he ocultado nada. ¿Quién es esta o este amigo incomparable que vela por ti?

Lo que me preocupa es eso de la cocaína, si me quieres hijo de mi alma, no te envenenes con esas drogas que acabarían con tu talento y tu vida para mí más querida que cuantas existen.

También va un impreso y el sobre en que me fue enviado para que te orientes. Tiemblo de que esta canalla persona haya enviado otro tanto a Manuelita.

Hoy he venido a Santiago a causa del terremoto de anoche inmediatamente después de concluir la carta. Me vine preocupada por Cacó, a quien hace tanta impresión. Realmente me dicen que anoche estuvo desesperada. Ahora está bien, pero no quiere volver a su casa.

¡Angelito querido, ella quiere a su papá!

Para concluir: si algo sé te lo transmitiré inmediatamente.

Te besa con toda el alma tu

Madre.

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Setiembre 7 de 1930

Hijo de mi alma:

A la llegada de la presente estarás impuesto por las dos mías, que por avión te mandé, informándote de lo que pesa y como soy quien soy te digo que primero me faltará a mí antes que a ti y las consideraciones que hice a los señores contralores sobre que no podía una vida transformarse por arte de encantamiento ni amoldarse a una vida nueva sin aviso previo. Ellos me encontraron razón y me contestaron que seguirían sirviéndote la misma suma de antes, pero que no tratara en manera alguna de aumentarla porque lo que se proponía era impedir a toda costa la salida del oro, etc. Ya te lo explico en mis anteriores. Quédate tranquilo pues si no te entregan los fondos inmediatamente te los darán después. Yo entregué aquí la suma de siempre: cóbrala que lo que es yo, me moveré aquí.

Todo lo que me dices lo comprendo y lo remedié a tiempo. Quién sabe si mis cartas que van siempre por avión no las ha recogido.

Ya tendrás noticias de las desgracias de la Patria, la maldad de un grupo de políticos que juegan con lo más sagrado por satisfacer sus ambiciones nos tienen en estado de sitio. Ya calcularás como estará este pobre corazón teniendo a Domingo, Rafael y Jorgecito alistados en las filas del ejército. Tu Vicentito también se envalentonó y se inscribió en la Guardia Cívica junto con Raf. Irarrázaval, que es para el resguardo de la ciudad. Si no fuera mi fe en el amparo de la soberana de Chile y Madre nuestra la Sma. Virgen me volvería loca. Amanecemos esperanzados en el triunfo definitivo y llegamos a la noche con los nervios desgastados. Hoy se rindió la escuadra pero a costa de mucha sangre.

Se cree que el autor material del movimiento es el loco Alessandri en con Froeden y Dávila -Carlos-. Sea quien sea es un crimen de lesa patria está desangrada en momentos en que todos estamos pobres a causa del derroche insano recién pasado.

No le deseo mal a nadie, pero veo con asco a los grandes culpables: Pablo Ramírez y comparsa.

En medio de tanta inquietud doy gracias al Señor de que no estés aquí en estos momentos.

Todavía hay grandes patriotas en Chile. ¡El heroísmo de Fernando de la Paz merece sitio al lado de los héroes de Verdun!

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Él solo defendió el fuerte Punta de Parra amenazando a los insurrectos a hacer volar el polvorín en cuya puerta se defendía. Mató a ocho mientras llegaba refuerzo y por último, para ganar tiempo les dijo: «Si avanzan un solo paso hago estallar el polvorín y moriremos todos yo no me rindo!» «La fuerza de su heroísmo los venció» retrocedieron aquellos centenares de traidores y fueron rendidos por las tropas leales. De la Paz puede figurar junto a Arturo Prat. Dicen que pretende a la Marga Solar, ojalá sea efectivo: es una dinastía que comienza y ante la cual hay que inclinarse.

Hoy 8 las cosas van bien. Almorzó con nosotros el Ministro de Marina Enrique Spoerer un gran marino echado por Ibáñez81 que vuelve en gloria y majestad a ocupar su puesto. Él y Vergara Montero Ministro de la Guerra son los salvadores de la Patria. La aviación se ha portado heroica y regiamente preparada. Sin ella estaríamos aún en guerra civil. Gracias a la soberanía de Chile no hemos caído en el poder de los comunistas, ni caeremos, sabiendo ser cristianos de cepa. No aceptaremos la animalidad ni la esclavitud.

Espero tu pronta respuesta, hace mes y medio no recibo tus cartas, ninguna llegó en los libros de Bulnes.

Te abraza y te besa tu

Madre

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10 setiembre -1930- Santiago.

Hijito mío de mi alma:

El invierno y las revoluciones han tenido cortadas las comunicaciones. Bolivia, Perú y Buenos Aires están entregando la antigua política, que yo no sé si es buena o mala, a las dictaduras militares que protestan de enorme desinterés, que prometen la felicidad, el progreso y la abundancia, pero que sólo dan malestar, carestía de la vida inmoderada, impuestos que ya son reparto del haber ajeno, ruina y coimas entre los favoritos de hoy. Es decir: los mismos abusos cometidos por distintas personas. Antes echaban la culpa a los aristócratas de repartirse los bienes nacionales, mañana o mejor hoy, se rentan con suelditos macanudos desde el presidente para abajo y a todos los que conspiran contra el orden. Ibáñez gana un millón novecientos mil pesos anuales; Pablo Ramírez quinientos mil pesos; Manuel Salas82, el ex-intendente, doscientos mil, tan sólo porque el pobre es amigote del presidente, etc., etc. Y entre tanto la crisis porque atraviesa el país es atroz: el trigo no tiene precio, ni la lana, ni los animales; pero el pan, la carne los colchones cada día más caros. El vino, se vende la mitad de antes y los señores cónsules, con excepción de Roberto, no se preocupan sino de vivir con agrado. De Bélgica pidieron 200 mil litros pero pagan 40 centavos por litro y todavía se quedan con el envase. Tomó el negocio un señor que cuenta con ganar solamente la prima de 35 centavos por litro que paga el Gobierno como ayuda a la industria. Por cierto que el vino que ha mandado es lo más infame que hay, y por consiguiente será un descrédito para los vinos chilenos. El señor que envió a Chile la propuesta es un tal Jorge Valdés Mandeville. Si Roberto quisiera buscar mercado para Santa Rita, ganaría mucho dinero y sería muy bueno para nosotros.

Voy a buscar al señor Franco Reiser para lo que me pides, que procuraré hacerlo con mucho gusto. Ojalá lleguen con vida los cajones.

¿Qué es lo que tienes? ¿Por qué me dejas con la inquietud y no me explicas tu mal? ¿No sabes que me muero de angustia? ¿O crees que yo te quiero tan fríamente como tú a mí? Yo para ti soy inexistente; tú para mí eres mi vida. ¡Y sino confiara en la Santísima Virgen me volvería loca!

Si tanto te preocupa la salud de Manuelita ¿Qué esperas para escribirle? Este último mes ha estado mejor, tal vez por las preocupaciones ajenas a su gran sufrimiento. Supongo recibirías la carta en que te cuento la muerte de Anita, mujer de tu cuñado Domingo.

Yoaco se casó entre gallos y medianoche, en Viña del Mar y la misma tarde siguió viaje a   —105→   Buenos Aires, sin presentarnos siquiera a su Laura, que según cuentan es muy inteligente y muy llena de méritos.

He tenido un gran placer en medio de mi dolor cotidiano: Conocí a Pedro Sainz Rodríguez. ¡Qué felicidad oírlo hablar de ti! Como me sentía orgullosa al oírlo hacer elogios que sin ser nuevos para mí tienen la autoridad de venir de un hombre genial como es él! Dijo que tu literatura era la que había producido la evolución del momento en la mentalidad mundial. Que tu creacionismo había sido la iniciación y que tu talento había sabido encontrar el modo de envolver en ese lenguaje el hecho histórico que era el complemento, que tu libro era un gran libro y que en España se leía con entusiasmo. Te puso muy por encima de Rubén Darío83, de Apollinaire, etc.

Y a propósito del que estás escribiendo dijo: «Yo imprimiré toda la producción literaria de su hijo». Te encontró muy parecido a mí: «Si yo la hubiera conocido a Ud. entre mucha gente, habría pensado es la madre de Vicente». También comentó tu personalidad moral, dijo que al principio se había dicho serías cualquier americano de talento pero que le llamaba la atención el señorío, extrañándose de que un cualquiera estallara en arranques caballerescos de los cuales tú no podías prescindir, porque te venían de muy adentro y espontáneos, que se preguntaba qué alcance tendría ese prólogo en que te referías a ascendientes nobles y no veía claro, porque otros como Valle Inclán84 y demás alardeaban de antepasados imaginarios hasta que ahora lo comprendía todo: «Es que no puede desentenderse de su sangre».

Lo invité a comer con el Nuncio, el marqués de Berna, la Sara del Campo, María Cristina, Juan Agustín Barriga. Este último le gustó mucho. Conoció a tu Manolita que comentaba con Jorge, a quién encontró igual a ti hasta en el modo de mirar -es decir a Jorgecito-.

He tenido el honor de que leyera mi novela y que le gustara. Lo invité a Santa Rita a donde me voy en estos días si el Señor quiere. Deseo se posesione bien de lo que eres tú, no sólo como talento sino como mi niño adorado. Estoy segura de que todo lo que he hecho lo encontrarás mal, puertas afuera, pero que te dejará satisfecho puertas adentro, ciertamente que nada se ha tocado de cuestiones prohibidas y lamentables.

Cacó está en un término de belleza de maravilla, que ya no es ponderable, se mira al espejo, se coloca la boina que debe caerle de lado, según su gusto se saca los pelitos de su melenita japonesa, y todo con tanta coquetería y encanto que no creo superable ¡Cómo quiere a su papá, y a su mamá! le dice: «su perrito», «su conejito», «su perla» ¡Dios y la Santísima Virgen la guarden! como a ti niño mío adorado.

Te abraza, te besa, te bendice, te adora tu Madre.

¿Recibiste mi libro? Te lo mandé a Milán. Más besos.

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12 Octubre -1930- Santiago

¡Hijo mío de mi alma! ¡Qué angustias me haces pasar! ¡Qué horror estés lejos de mí y amenazado de operación!

¡No! ¡Hijito de mi alma! ¡No te operes, sométete a un tratamiento con el médico más notable del mundo, pero no te operes sin estar conmigo! ¡Mira que la sola idea me hace temblar! ¡Yo creo que me volvería loca! ¡Tú no comprendes cómo te quiero yo, y cómo sufro de no poderme dividir y estar con todos mis hijos! ¡Piensa que no es natural esta separación: tú eres mi corazón y yo no sabría vivir sin ti, sin la esperanza de que algún día me tengas lástima y te vengas a vivir conmigo, con tu padre, con tus hijitos, con tus hermanos, con toda lo que es tuyo!

Sigue el consejo de doctor Pezzi del que te descubrió el mal y te aconseja no operarte. Él debe saber más que el otro de París. Que te vea Leven y que te cure. Dios y la Santísima Virgen, te sanarán ¿Cómo irían a desoír mi oración de todos los instantes?

¡No, yo tengo fe! ¡Creo que te sanarán!

El doctor quiere saber si sufrías del estómago cuando chiquito. Sí, mi niño adorado, sufrías: tuviste uno que llamaron catarro intestinal cuando tenías un año. Fue muy larga la enfermedad y no digerías nada, absolutamente, a pesar del sumo cuidado y haberte criado yo, hasta los ocho meses. Después se te daba todo alimento recetado por el doctor del Río, preparado por mi mano y a sus horas, de modo que no había ni pretexto para que se te indigestara.

Te mejoraste después de un mes alimentándote con leche de burra mezclada con algo que no recuerdo. Toda tu infancia fue delicada: de cualquier cosa tenías fiebre y malestar de vientre, a pesar de mi dedicación escrupulosa. Después ya recordarás los dolores de cabeza brutales, los dolores de cintura, las vinagreras, el eterno caerte mal los alimentos.

¡Qué felicidad sería la mía, si este descubrimiento te condujera a la salud, Hijito de mi alma!

En una de mis anteriores te mandé mil liras. Me alegro que en vez de viajar te hayan servido para ver médico. Dime todo lo que necesitas, cuídate pensando en mi angustia. ¡Ven! ¡Ven! donde tu madre, dame ese alivio.

Ven siquiera hasta Buenos Aires, para empezar. -Allí te puedo ir a ver, puedo sentir tu voz cada día por teléfono. Nada me dices sobre mi proyecto de hablar a París, de ponernos de acuerdo, yo arreglaré aquí el precio de modo que a ti sólo te cueste la molestia de tomar el fono.

Te mando la segunda de cambio de las mil liras, por si se hubiera perdido la primera.

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No quiero atrasar la presente. No te demores tanto tiempo en escribirme porque yo agonizo. Cacó, te manda este recado: «Un abrazo y un beso, que se venga luego, que lo quiero mucho» -original- Te besa tu pobre vieja que ya no tiene fuerzas para sufrir tanto. Tu Madre

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Noviembre -1930- Santiago

¡Hijo de mi alma!

¡Cuánto tiempo sin carta tuya y con la amenaza de que estés enfermo! Creo eso es crueldad en toda tierra, tú que sabes como soy yo, ¿por qué me atormentas? Ténme al corriente de cuanto te pasa en cada vapor. Arregla lo que te he dicho sobre hablar de cuando en cuando por teléfono. ¡Que yo oiga tu voz hijo mío adorado, para consolarme de esta ausencia que es mi martirio!

He cumplido tus encargos: en el vapor de este mes irá el vino para Roberto Suárez, a quien escribí enviándole mi libro, como tú lo deseabas.

Ahora tú haz por mí algo. Te voy a pedir un favor. Pide a Notre Dame de Lourdes te haga el milagro de sanarte radicalmente, sin necesidad de operación. Prométele, si lo obtienes y quedas bien convencido del milagro ir a visitarle.

Reza solamente esta jaculatoria tan cortita: «Oh María concebida sin pecado, rogad por nosotros que recurrimos a Vos». Yo te aseguro que te oirá, y entonces tú volverás a creer. ¡Hazlo por mí! Aunque creas es un absurdo haz la prueba. No te empecines en no querer los medios sobrenaturales. Ríete de mí cuanto quieras pero hazlo. ¿Qué perderías tú? Por mi parte estoy completamente segura de que Ella, tu Madre, te oirá.

Que esto te sirva de experimento para probar si existe el auxilio de arriba. Tú le dijiste una vez a monseñor Felice: «Que más querría yo que poder creer». ¡Yo te doy el medio! ¡Ante un milagro la resistencia sería ya un capricho perjudicial; una cobardía moral!

¡Contéstame que lo harás para consolarme! ¡No te puedes imaginar el estado de nervios en que estoy, mi vida es un tormento! y sólo de ti depende devolverme la paz o darme un poco de felicidad. ¡Si soy algo para ti dame gusto en esto que para ti es un juego!

Te mando recortes de diario para que te diviertas. Me dieron un té algunas amigas para felicitarme por la novela. Han hecho críticas muy favorables y elogiosas: Ricardo Dávila85 -académico- Pancho Rivas, Araya Bennet, Samuel Lillo86, Antonio Orrego, el Padre Morales -académico y muchos otros. En cambio el gran Díaz Arrieta, comenzó por alabar y concluyó a palos criticando que yo «tan católica y tan marquesa» me preocupara de los campesinos y otras sandeces por el estilo. Recuerda el baile aquel, haciendo una evocación de la castellana, así, sin venir al caso tan sólo para probar que él asistió. Desahogó sin mala voluntad a ti en mi pellejo: pura bilis.

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Todo el mundo me pregunta por ti con gran cariño. ¡Hace tanta falta la figura principesca de mi niño adorado!

Los niños tuyos están muy bien, gracias a Dios. Manuelita ha pasado en cama estos días con fiebre. Se le están aplicando unos rayos ultravioleta para ensayar de calmarle los dolores al cerebro. Está un poco mejor.

Yoaco, vive en el quinto cielo con su inteligentísima mujercita, se adoran. Creo, que el Presidente le dará ascenso pronto, lo estima mucho y ha visto lo que vale precisamente ahora que las cosas se presentan en borrasca deshecha. El verdadero Embajador es Yoaco ¡Y cómo te quiere! ¡Pero tú, no quieres a nadie! ¡Qué felicidad!

El 7 empieza el mes de María, el mes en que no puede sucederme ninguna desgracia ¡Cuánto voy a rogar por ti hijo mío de mi alma! y cuánto voy a reposar.

¡Adiós, hijito mío de mi alma, quiéreme, tenme lástima! ¡Piensa que nadie puede quererte como te queremos Cacó y yo!

Y recibe sus besitos de flor y los míos con tanto amor y sabor de desencanto, tuya tu Madre.

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12 Noviembre -1930- Santiago

¡Hijo mío de mi alma! Todo el cuento de los monos negros es pura calumnia y todavía estúpidamente inventada. Ya era tiempo que conocieras a Manuelita y que no cabe en su orgullo de gran raza disponer de todo lo que ella no debe considerar propio: primero se moriría de hambre, de frío, que tocar algo tuyo, también porque creo, como te lo he dicho, que te quiere.

Tus monos negros están colocados en la sala de balar de tu hijo, junto con tus muebles antiguos, tus cuadros cubistas, tu escultura -chica- de Lipchitz. Los monos sufrieron en un temblorazo, pero los he visto reparados -tal vez- pues no se nota ningún desperfecto. La escultura grande Lipchitz y la otra negra que tanto estimas la tengo yo, tal como tú lo dispusiste al abandonarnos.

Así, como no conoces a tu mujer, desconoces a tu madre. ¿Puedes pensar que mientras yo viva y después de muerta pueda faltarle algo a tus hijos y a ella que quiero como a hija a pesar de su frialdad conmigo? Pero, es que yo soy humana y comprendo lo que pasa por esa alma tan herida y que no ha tenido jamás un consejo acertado y que además tiene en su contra un orgullo mal dirigido, porque los derechos del amor maternal no son discutibles y ella en su pena olvida que siendo tu madre no podría prescindir de él, aunque me odiaras. ¡Podrías injuriarme, podrías atentar contra mi vida, podrías, no se me ocurre qué hacer en mi contra y yo sería la misma! El corazón no se manda: se domina, pero la procesión va por dentro.

Ten la plena seguridad de que paso pendiente de adivinar las necesidades de cada uno; de ver que gocen de la vida; que se presenten en sociedad a la altura de la situación en que Dios los ha colocado. A Manolita, le encargo trajes a Europa igual que a Marita. Vicentito viste ya pantalón largo y las chicas escogen sus toillette con gusto exquisito y sumamente personal. Marie Louise, con su carácter formidable en medio de un juicio superior y maneras muy suaves, resuelve y decreta y dirige a la Clotilde después de no tomar otra opinión que la de Lolita que es su amiga del alma. Cacó, tiene toda la gracia, toda la coquetería de una princesita francesa: se mira al espejo, arregla sus lazos, se coloca el sombrero caído a un lado, se sacó su pelito de ébano a asomar al otro lado... se estudia de frente, de perfil. Esa no consulta a nadie: «Mamita quiero un vestidito rosado: ese color me queda bien, pero, con sombrero igual y un saquito para llevar la Mamita Virgen, mi palacio y mi plata. ¡No se le olvide que tiene que darme hoy!».

¡Ella sabe que su mamita quiere esa franqueza porque significa seguridad en el cariño! ¡Yo le he enseñado así que me pida lo que quiera, con un beso! Llega preguntándome: «¿Qué me   —111→   tiene ahora mamita?» ¡Pero esa pregunta va acompañada por besos, abrazos, colgada de mi cuello y en secreto! ¡Dios la guarde!

¡Es la única sonrisa de mi vejez! ¿Por qué? ¡Porque tú no estás!

¡Ciertamente que no mostraré tu carta a Manuelita, cómo se sentiría de humillada!

Todo lo que dejaste en mi poder está tal cual, el mueble, que no sé qué contiene, lo hice subir al piso alto del cuarto de ropa y colocar dentro de uno de los armarios que están pegados a la pared. Tu traje de chino, tu gorro, tu careta. ¡Cuántas veces te he besado en ellas!

Nada me has dicho sobre «María del Carmen» ¿Es que la encuentras peor que a tu tía del mismo nombre?

Tu carta me trajo algo de tranquilidad ¡Ya no era vida la mía! No pases nunca tanto tiempo sin escribirme y contesta las preguntas que te hago. Háblame más de ti, de tu salud, de tu ánimo. ¡Dime si existimos para ti!

¿Te parece buen agente para los vinos nuestros Roberto Suárez? Aquí atravesamos por un momento de crisis desastrosa. Los productos de los fundos están detenidos por falta de compradores; las bodegas rebalsando vino con gran disminución de compradores, a pesar de los bajos precios. Tu papá ha pasado muy malos ratos con esto porque la producción del año que viene excederá en mucho a las vasijas y bodegas que tenemos pues se cosecharán alrededor de cien mil arrobas. Y esto que Sta. Rita es lo que más se vende. Yo le digo que lo mejor es buscar mercados europeos ya que la cosecha ha sido pésima en Francia e Italia.

Ahora tenemos esperanza de que se abran los mercados yankies con el triunfo de los diputados húmedos. Alemania que no quiere vinos franceses habría sido bueno pero, están en crisis aguda. «Sentados sobre una mina que estallará cuando menos se piense».

Concluyo mi carta en Santa Rita, tu hijo, duerme en este momento entre sus dos primos inseparables, Yrarrázaval. Ninguno de ellos adolece de piojentos ni degenerados, ni cretinos, gran raza; ¡no hay superior! -y lo llevan a flor de fisonomía- y que bueno y señor es Vicentito, cómo adora su hogar -cómo sabe ser gran persona-.

Adiós hijo mío de mi alma, cuídate con empeño y constancia no dejes cundir tu mal. ¡Piensa en mí! Acaban de operarse sin operación médica, dos milagros de primera clase en Lourdes: ambos tuberculosos y desahuciados. Yo te pido hijito mío que vayas, que hables con tu Madre del cielo, que le pidas lo que quieres; Ella te escuchará. ¡Piensa en tu Madre y es todo poderosa! A su amor te entrego y con Ella te mando un beso, un abrazo y una bendición. Tuya tu madre.

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12 de Enero 1931 -Llolleo-

Hijo de mi alma: Tenía ya el alma en un pelo: ¡un mes sin saber de ti! Yo te contesto a vuelta de correo siempre de modo que si se retardan las mías es culpa tuya, a pesar de que nunca me paso mucho tiempo sin escribir aun cuando no reciba.

Estamos en Llolleo desde el día 1º. Anticipamos algo las vacaciones por Lola que espera el 6º hijo a principios de febrero y no sé si querrá pasarlo aquí como es mi deseo, para tenerla a mi lado.

Los tuyos quedaron en Santiago. No pude conseguir con Manuelita vinieran con nosotros o por lo menos que le tomáramos una casa en la población María, donde estaría independiente acompañada con su familia y amistades. Ayer le volví a escribir rogándole sin esperar que acceda, pero pensando en el provecho que sacaría Cacó que quedó delgadita y pálida después de una gripe que le atacó la garganta antes de venirme. Creo irán a Apoquindo, porque además no quiere Manuelita alejarse mucho de Santiago por Vicentito que debe volver a dar algunos exámenes para pasar año. Es verdadero hijo tuyo; corta un pelo en el aire, pero es el récord de la flojera. Está inmenso, muy buen mozo, altivo, caballeroso y desdeñoso ¿Te reconoces?

Otra fuerza que le retiene en Santiago es la Manolita con su pololeo con Jorge quien no quiere moverse de Santiago por sus estudios, pues los ingenieros que desean trabajar, obtienen trabajos en los meses de vacaciones. Jorge es el primero en la Universidad y es además empeñoso al extremo que me preocupa su salud: está muy pálido, pero tiene voluntad de hierro imposible de manejarlo.

Te ríes de los millonarios chilenos o crees que te engaño al decirte que no disponemos de dinero para capitalizar. Has de saber, niño mío, que es tal la crisis que ningún banco presta dinero con ninguna garantía y esta situación mundial, tiene a todos los que viven de sus rentas a tres dobles y un repique. Los que están bien son los que reciben grandes sueldos, los militares, los compadres del Gobierno que rentamos con los impuestos de guerra que nos sacan sin haber otra razón que la de sostener la dictadura. Tú sabes que el Presidente recibe un millón de pesos al año y además dispone de otro millón para gastos secretos, y por allí va todo.

Hasta el momento nosotros vamos escapando gracias a que se ha bajado el precio del vino ridículamente para conquistar la plaza, ¡nuestra competencia es a muerte! Lo demás ya te lo he explicado en mi anterior.

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Dice tu papá que [ilegible] Primo de Rivera no necesita el libro de Casa Real, se lo pides a Ismael a fin de que quede en tus manos. Es tuyo de modo que no veo la necesidad de mayores explicaciones.

No te he puesto cable porque creo mejor explicar por carta el asunto, además tu carta me llega ahora nomás y mañana 13 cumpleaños de tu madre, no irá nadie a Santiago y desde aquí no veo la manera de hacerlo.

Por mar te mandaré una crítica interesantísima sobre «María del Carmen» por Francisco Rivas Vicuña, me llegó una de España en «Mujeres españolas»; es corta pero benévola. Me llaman la verdadera Marquesa de Casa Real ¡Cómo habrá rabiado la india brava de la Caamaño!

¿Cómo estás hijito mío? Especialmente te he recordado en estos días en que me repitió el ataque y salió la piedra ¿Para qué decirte, fue milagroso? ¡Apenas encendí una vela a Teresita del Niño Jesús pasó el ataque repentinamente, te lo juro!

¿Qué es de Blanca Blest? No me escribe desde hace mucho tiempo. Por compasión escríbeme seguido, piensa no tengo otro placer en la vejez; ¡61 años! ¡Cerca del fin y tenerte materialmente tan lejos!

¡Cuídate mucho! Yo también tengo sueños macabros; ¡hace poco soñé la noche entera que habías muerto! ¡Ya supondrás cómo sería mi desesperación! Sin tu carta habría sufrido verdadero martirio.

Adiós hijito de mi alma, piensa en mí y que el Señor y la Sma. Virgen te amparen.

Te besa con toda el alma tu madre que te adora.

Procuraré cumplir con tu encargo de los retratos hechos por Gris. Otro beso.

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20 de Marzo -1931- Santa Rita

Hijo de mi alma: Hoy me traen de Santiago tus cartas de marzo y tu libro traducido al inglés. Los elogios que se hacen de ti no me toman de nuevo ni los necesito. Nos conocemos de antiguo... Lo que sí me sorprende es el borbollón de palabras huecas y sin sentido del tal González-Azno, que trata de imitar tu lenguaje y le resultan peos -indigestos-.

Alma hermana de Guillermo de Torres87 (sic) con pretensiones Cervantescas ¿Qué alcance super-oculto da la maravillosa frase «el que trajo las gallinas» ¿Qué relación existe entre mi hijo que lleva sangre real en las venas y un pollero? Acaso Regaste a Madrid con bronquitis y él ha poetizado tu catarro con ese juego de palabras sublimes? Le estaría mejor rebuznar. ¿Que tú tienes cara de cantante, de medalla mal troquelada? ¡Explícame, hijo mío! no doy con el sentido común de ese sin par de la ordinariez y de la mentecatez. «Rostro afeitado y torcido por las luces del fin de la fiesta» o lo que es lo mismo: «cernícalo me lo potente -padre de la comezón- déjeme rascarme un poco, antes que toquen la oración». Cuanto bien le harías convenciéndolo de que se dedique a poeta-veterinario de obstetricia afeitada y torcida.

También puede ser que tu madre no alcance a comprender la sublimidad elevada del literato González a causa del medio en que vegeta: «cada oveja con su pareja» y aquí en mi tertulia balamos.

Dejemos al inminente escribidor y vamos a lo que pueda interesarte: el lunes si Dios quiere, iré a Santiago y cumpliré tu encargo de la carta.

Pasaré aquí el día de tu Santo con la clavadura cada vez más honda de no poderte abrazar.

El único que me faltaría, los otros, Vicente, vendrán a felicitar al abuelo, pero mi pensamiento estará llorando al ausente con cara alegre. ¡Esta es mi vida! ¡Pobre corazón hecho de tormentas y de fuego! ¡Cuánto envidio la indiferencia, la capacidad de olvidar, ese saber vivir del modernismo que va enredando los días entre risotadas y jolgorios, sin mirar hacia atrás... sin preocuparse de atesorar para la vejez las afecciones que no pueden morir!

Mis vacaciones, como te cuento en mi carta de principios de Marzo -por aéreo- han sido atroces. Lola en peligro de morir a causa de su sexto hijo: Teresita. La estupidez de los asesinos que se titulan médicos y que no alcanzan a ser curanderos me la puso en grave situación: un remedio de los que producen shock aplicado al estilo yangas-yangas le produjo una reacción tan brutal que se puso negra: yo la creí en agonía. Se le olvidó al idiota de hacerle aplicar la inyección que hace tolerable la vacuna y solo le aplicó el veneno. La inyección se llama electroargol. Y el muy bruto le   —115→   colocó la segunda antes del tiempo indicado, y como la primera no se había eliminado aún se produjo el shock espantoso. La segunda la puso entera, es decir, los dos tubos, tal como se debe hacer. Todo esto sucedió mientras yo llegaba de Llolleo; por misericordia del Señor me encontré en el momento del shock y pude darle café y más café, hacerle fricciones para producir reacción y agonizar con ella. ¡Qué bueno es el Señor conmigo! Si yo no hubiera llegado la habría perdido. ¡Qué sería de mí sin mi Fe!

También te digo en mi anterior que tenemos una mina de oro que a juzgar por los síntomas parece fabulosa. ¡Ya se llevan descubiertas más de cien vetas y el rinde es éppatant! Entre 30 y ciento veinte gramos por no sé qué medida. Lo que sí sé es que con un rinde de 3 gramos por esa misma medida se trabajan todas las minas conocidas. Claro que esto es de largo aliento; nos daremos a santos con producir algo este año, pues tu papá no quiere entenderse con yankees ni por nada y prefiere ir poco a poco. «Qui va piano valontano». Esto nos viene muy bien pues la crisis nos tiene fritos: no se vende vino, ni cosechas, ni los animales tienen precio, en cambio hay que pagar impuestos usurarios y servir las deudas.

No he sabido si Roberto Suárez recibió los cajones de vino que le mandé. Él y tú podrían hacer grandes negocios haciéndose agentes de Santa Rita, pues la cosecha en Europa ha sido pésima. En Francia han disminuido en veinte millones sobre el año pasado. También en Italia ha sido mala.

Tus niños míos adorados están bien, gracias a Dios te quieren con locura y rezan mucho por ti. Yo estoy mal, botando piedras de los riñones. No dejes de tomar Athofan, es el único que evita los ataques grandes: una en el almuerzo y otra en la comida. Esa enfermedad es traicionera, uno se cree bueno y de improviso viene el ataque. Espero que la Sma. Virgen te libre como se lo pido cada día.

Adiós mi niño adorado. Recibe todo mi cariño y un gran abrazo y un beso en el día 5. Va por cable mi saludo. Que el Señor te abra los ojos y te bendiga. Tu Madre

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23 Abril -1931- Sta. Rita

Hijito de mi alma: Tú siempre con tus curitas y con tu irritación contra lo único verdadero y sólido que existe en el universo: Cristo y su Fe. No soy de las que creen en los hombres; creo en las ideas. No en vano se envejece; algo queda en el cráneo después de 61 años y de roce permanente con mundo tan diverso. ¿Qué has sacado tú, niño mío, con tu soviet criadero de mártires y de esclavos? Esos sí que son los verdugos del pobre, los que engañaron con su canción del comunismo, del reparto por parejo de los bienes ajenos... Y después de invocar la Biblia y la figura sublime a sus ojos de un caballero que ellos sabían llamarse don Jesucristo, batieron su bandera de amor y de caridad como un sebo, para mejor atraer a las masas que hoy gimen en el martirio de la más salvaje esclavitud. Y eso hoy lo reconoce todo el mundo que se llama civilizado. ¡Ellos, los salvadores, los redentores de la humanidad comen bien, visten bien, remuelen mejor y gastan sin contar! ¡Qué caos!

En cambio donde hay una monja, donde hay un buen cura, es decir: un verdadero discípulo de Cristo, hay caridad. Los hospitales regidos ahora en este país por seglares, son focos de corrupción administrativa; las enfermeras -y eso me consta- que reemplazan a las religiosas heroicas de ayer, no sirven a los enfermos si no les dan coimas, aunque los vean agonizantes. Al tiempo de pedirles un vaso de agua hay que mostrarles la escuálida amarra del pobre pañuelo donde guardan sus economías. Dos sirvientas de casa han tenido que operarse y por ellas he sabido que aún la primera noche no consiguieron que la veladora les ayudará a sentarse en... mientras no le pagaron un peso. Es de advertir que las canallas esas ganan 300 pesos mensuales, mientras las heroicas monjitas ganan 40$. ¡Además aquellas comen a cuerpo de rey y las religiosas, de la comida de los enfermos que no se puede comer sino por hambre! Demás está decirte que mis enfermas se les manda diariamente lo que necesitan o en comida o en dinero y que jamás las mando al hospital sino por enfermedades que no se pueden cuidar en casa ¡Ése es el ejemplar servicio sin gobierno religioso!

¡Viva la coima! ¡Viva la melena, el rouge, el traje indecente y el shyniny y todos los adelantos que vienen a echar fuera la oración que da fuerzas!

¡Desgraciadamente tu reina-madre no podrá ver las obras que desea realizar! Me siento muy mal y creo que la hora llega de la despedida hasta más allá. Una mina no se explota con producción efectiva antes de un año, y esto por ser de la calidad que es. Por ahora estamos a tres dobles y un repique sin vender los productos, etc., como te lo digo en mi anterior. Esto debió venir hace dos años. Pero me iré con la idea de que algún día podrán Uds. mis hijos gozar de abundancia y espero que también nos volveremos a ver allá delante del que nos creó. ¡Allá te tengo que encontrar ya convencido de la única verdad adorando al que yo adoro!

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[27 de mayo de 1931]

¡Hijo de mi alma! Tu última carta me dejó sobresaltada. Tú siempre el mismo: en medio de la chusma querida que sólo es una manada que va al matadero. ¡Y tus intelectuales unos soñadores a quienes la ambición del poder hace soñar con un orden que no existe en este mundo donde cada ser es lo que le dicta su buen querer y no lo que exige la conciencia! ¡Y esto es lo que se da en la flor de llamar: evolución de las ideas! En vez de vuelta de carnero de los que carecen del régimen ordenado según la ley de Cristo: «Dad al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios».

¿Será majar en hierro frío, lo que te dice tu madre? Algo te quedará cuando ella no esté al alcance de tu vista, que será más pronto de lo que se crea... Me siento muy mal, el brazo me tiembla cada vez más, como los árboles cuyas raíces están podridas, es el principio del fin. Ya a esta edad no se reacciona. Un favor te voy a pedir y es que coloques en tu cartera esa imagen que te envío. Yo creo en el poder de la santidad y por ende en que ese siervo de Dios, emparentado con nosotros por «de la Cerda», te protegerá como el mejor amuleto: representará para tu corazón el amor y la inquietud en que vivo por tu felicidad temporal y eterna. Ya no puedo contar con ir a verte, y tú no quieres venir, ¿entonces? ¡Guarda esa imagen que no hace bulto y que te dice de mi ternura invariable! ¡No lo tires sobre tu mesa ponlo junto a tu corazón como me pondrías a mí si me quisieras!

Ayer vinieron Marie Louise y Cacó, tan superiores, tan finas, tan únicas! La más grande con su reposo de gran mujer, su tacto, su talento y su gran carácter manejado con dulzura. Y la chica, tan maravillosa, tan extraordinariamente mujer y preciosa y tierna como lo habría soñado un poeta del antiguo régimen, de esos que entendían en la perfección física y moral para adorarla de rodillas. Ella, mi Cacó siempre con su estribillo: «Que se venga, que se venga inmediatamente, que yo lo quiero abrazar y besar». ¡Pobre angelito, admirados por todo el mundo y abandonados por su padre!

¡Qué época más terrible la que atravesamos! Sin esperanzas en la tierra y viendo caer uno por uno los robles de la montaña para alzarse las matas de zarzamora y los palquis... El país cada vez más perseguido por los impuestos y el dominio sin equilibrio, ensayista porque no han estudiado el modo de gobernar con equidad. Creen que halagando al pueblo serán sostenidos y no ven que esa opinión se vuelve enemiga según se le grita más. Producen el hambre con sus leyes sociales que nos obligan a hacer mayor la legión de desocupados a quienes ellos creen les serán fieles en el momento supremo de las contrarrevoluciones, porque no cuentan con que al producir el odio de clases, levantan la tempestad contra ellos mismos que se han tomado las posiciones que tanto envidiaron consagrándose en legisladores de quimera. ¡El mundo está loco! Y en todo se ve   —118→   la luz de Dios cumpliéndose las profecías del Apocalipsis de San Juan, los castigos horrendos anunciados para cuando los hombres se vuelven contra su Creador. ¡Rusia! La Rusia mártir que trata de abolir la religión católica, llenando el estómago de la Europa con el trabajo de su pueblo esclavo y martirizado como no hay recuerdo en la historia.

Y como tú eres maestro, yo discípula -hasta cierto punto- te haré mis profecías: ¡La Europa está embrutecida: no ven que Rusia quiere producir la revolución social, el caos con sus productos fuera de toda competencia en el mercado mundial puesto que es sangre de esclavos, y los muy inteligentes aún no les cierran las fronteras aduaneras!... Están esperando que crezca el ejército rojo y que tengan los rusos fuerzas de guerra capaces de hacer temblar el viejo continente que ya parece estar atacado de ataxia locomotriz.

Si Europa no despierta de su sueño producido por la vida viciosa fuera de la ley de caridad dictada por Cristo, fuera del orden, fuera del ambiente de familia unida por el respeto y el amor a los de su sangre, polo opuesto del sistema soviético, Europa pasará a ser un campo desierto de seres racionales, poblado de cadáveres y sus habitantes llevarán cadena sin siquiera poder mirar al cielo que para ellos no tiene significación: ¡en esta vida concluirá su dolorosa jornada, puesto que arrancaron de su espíritu la esperanza! Es el regalo ruso, es su venganza, venganza de judíos sobre la raza que los oprimió ¡el infierno aquí y eterno!

¡Sobre todos los desastres queda, hijo de mi alma, a los que creemos la seguridad de que esto tendrá fin!... Y comienza la eternidad donde la mano del hombre cae desplomada y la Mano del que murió en la Cruz se alza para enjugar nuestras lágrimas y darnos la bienvenida allá donde no existe el dolor! Cuídate mucho. Te besa tu Madre que te adora. 27 mayo -1931-

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7 Agosto 1931 Santiago

Hijo de mi alma: ¡Qué días hemos pasado! ¡Nada más feroz que el hombre arrastrado por la pasión! ¡Cómo corrían los lanceros en persecución de las masas por su parte enfurecidas con el asesinato a mansalva de Jaime Pinto, héroe de tu sangre que desafió la muerte como un gran español de los tiempos pasados!... Pertenecía a una banda juramentada: eran unos cuantos que no tenían madre ni hijos y que iban a la conquista de la libertad sin reparar en medios ni sacrificios. Jaime estaba repartiendo proclamas en la puerta del hospital de San Vicente, cuando un carabinero lo asesinó por la espalda. Como toda idea grande se bautiza con sangre, prendió la mecha y ya no fue posible contener la indignación. Los muchachos universitarios se habían atrincherado en el edificio de la Universidad. Dispuestos a no abrir las puertas mientras no renunciaran los militares: estaban bien armados y con abundante bencina y paja para incendiar la casa por los cuatro puntos. El Gobierno los sitió por hambre: desde el Club de la Unión les enviaban provisiones, pero, llegó el momento en que todo se agotó. Comenzaron entonces los mensajes, intervino el administrador eclesiástico porque el plan del malvado marino, entonces Ministro del Interior, Carlos Froeden -hijo de un panadero de Talcahuano- había decretado que si antes de las 6 de la tarde no se rendían lanzaban las ametralladoras allí colocadas desde la mañana anterior. ¡Canallas! Los universitarios accedieron y se despejó la Universidad, pero, como la efervescencia contra Ibáñez y el ejército cundía fantásticamente, siguieron los combates a palos en las calles, invadieron las Cámaras insultando a Ibáñez por el saqueo del país: cinco mil millones de deuda en rascacielos, compadrazgos y sostenimiento del ejército, envíos en comisiones a Europa con 500 mil pesos para los primeros gastos. En esto se produjo el asesinato de Jaime, y en su entierro, que formó parte de la revolución, pues, asistió todo Santiago. Mujeres, hombres y niños de todas las clases sociales, mataron los carabineros a Alberto Zañartu Campino y a su chófer. ¡Lo que pasó entonces no es para descrito: el populacho y los jóvenes de la guardia cívica, improvisada en ese momento, cargaron contra los carabineros en guerra a muerte! Frente a nuestra casa combatían, las balas se cruzaban -quedaron dos incrustadas en la muralla-. Me traían heridos que curé, entre ellos Valentín Saldías88 con tres tajos en la cabeza, valiente y teatral como Dios lo hizo.

Al fin comenzaron a tomar parte los médicos, declarándose en huelga y no queriendo asistir a ningún carabinero herido, en seguida se incorporaron a la revolución, los abogados, la Corte Suprema, los ingenieros, etc. El golpe de gracia lo dio la huelga de los Bancos: acordaron cerrar las puertas hasta que saliera del país Ibáñez. Y entonces se operó el desenlace más estupendo que ha presenciado la historia: el triunfo del espíritu sobre la fuerza bruta ¡Salió el infeliz   —120→   dictador, pobre hombre que fue sacado de la prefectura de policía de Antofagasta para servir de biombo al grupo masónico triunfante, en la Presidencia de la República!

¡Se fue entre gallos y medianoche, huyendo después de haber dejado destilando sangre al pueblo que inconscientemente saqueó a instigación del degenerado de Pablo Ramírez que después de cargarnos de impuestos de guerra disfruta en París de los millones robados, y se hizo la paz al grito delirante de libertad! ¡Qué espectáculo hijo de mi alma! ¡Las almas se salieron de madre, los niños parecían penetrados de la majestad de esa palabra de cuyo sentido tanto se ha abusado! Todo Chile gritaba a una voz: ¡Viva la libertad! ¡Fue tal la magia ejercida en los chilenos que parecía una resurrección después del embrutecimiento producido por la tiranía! Los timoratos anunciaban saqueos, incendios, matanzas, yo sentía en mi interior que nada de eso sucedería a pesar de que tu papá, que es un valiente, hizo armar a todos los capaces. Mi fe descansaba en las alturas: hacía apenas 10 días habíamos sacado en procesión a la reina de Chile y Madre nuestra la Santísima Virgen del Carmen bajo una lluvia torrencial. ¡Nadie había acobardado! Todos pedimos se llevara a cabo el homenaje ¡era un espectáculo conmovedor! ¡La Señora de cielos y tierra se cernía sobre los paraguas que semejaban alas negras de gente que Nevaba luto en el alma!

¡Y la lluvia corría por el duro y purísimo semblante como si nos acompañara a llorar los infortunios de la Patria! ¡No fue larga la espera! El orden está restablecido, los jóvenes y niños tomaron a su cargo las obligaciones de los carabineros, custodiando la ciudad y dirigiendo el tránsito como los más expertos. A pesar del frío de nieve las muchachas parecían en la gloria y el pueblo las respetaba con cariño. En la esquina de San Martín y Moneda y en Diez de Julio, dirigían el tránsito niños de siete años ¡Era comérselos a cariños! ¡Se creían dueños de Chile! Como es natural los universitarios se creen los héroes de la jornada y en estos momentos están bastante alzados. El ejército se ha mostrado digno de su renombre de disciplina: no hubo una nota discordante y han vuelto a sus cuarteles a servir a la Patria en sus actividades como antes de la dictadura. Los carabineros ya han vuelto también a asumir sus funciones, ahora que vuelve la calma.

Sobre candidatos a la presidencia, parece ser D. Juan Esteban Montero89 quien reúne las condiciones y el que desea Chile entero. Creo será candidato único, pues el compadre Alessandri ha llegado más loco, más simpático y más sin rumbo que nunca. Sus discursos siempre con el mismo final: «Sólo el amor es fecundo. El odio nada engendra».

¡Ciertamente los hijos no ceden el paso, quieren ser dinastía... pero no serán! Alfonso Bulnes no me ha entregado sino unos libros para Ángel Grez y otros, pero ninguna carta ni fotografías que me anuncias.

Ahora comprendo por qué no recibes mis cartas: en los procesos de la dictadura figura la   —121→   violación de la correspondencia y como yo te hablaba con la franqueza mía contra Ibáñez, etc. no les daban curso. De las tuyas a mí sí que no comprendo: hacía mes y medio que no llegaba nada tuyo.

Te escribo desde la cama, hace diez días que estoy con bronquitis, voy mejorando. Los tuyos tampoco se han escapado ya, gracias a Dios están mejor menos Manuelita que cae y levanta, está tan flaca que espanta y con esos dolores al cerebro atroces.

En pocos días más nos trasladamos todos a Sta. Rita a pasar el chubasco. Las cosas van muy mal, gracias a Ibáñez, nadie tiene dinero, nadie compra.

El caballo de batalla del pasado régimen era: ¡La crisis mundial, ¡ladrones sin patria! ¡Con qué alma irán a pasearse por Europa gastando nuestro dinero!

El vice-presidente señor Montero le dijo a D. Domingo Amunátegui90 que sólo él tenía a su servicio, para su persona 15 automóviles con sus respectivos chóferes y que cada día se horrorizaba más del estado de las finanzas. Él no quiere por nada ser Presidente, pero, yo creo se lo impondrán y no podrá rehusar.

Estoy muy cansada, mi pobre brazo y mano me tiembla mucho.

Adiós niño mío adorado, cuídate mucho y que yo te alcance a ver en mi permanente plegaria.

Tus hijos te desean con delirio. En estos días apenas los he divisado, no los dejo entrar a mi dormitorio para evitarles el contagio. ¡Mi Cacó se asoma y me tira besos!

Recibe los míos y mi abrazo con toda el alma

Tu Madre.

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10 Nov. 1931.

Señor Vicente Huidobro

Hijo mío adorado: No es en tono irónico que te escribo sino en el de quien te quiere por encima de todo lo creado.

Quisiera verte entre los tuyos gozando de tus hijos y al lado de la única mujer que está a la altura espiritual tuya y que envuelta en silencio se va consumiendo tal vez de pena -por lo menos así lo creo yo-. Es como una nube que se derrite al calor del sol: cada vez que la veo la encuentro más deshecha y con esos dolores al cerebro que la tumban ¡pobrecita!

¡Y tus hijos, te quejas de que Vicentito se haya inscrito! -espontáneamente- en la Guardia Cívica, porque allí manda un tal León. Si tú lo tuvieras bajo tu dirección viviendo aquí con todos los tuyos habrías evitado ese disgusto, que para mí es un orgullo, porque lo veo hombre. ¡Es tan bueno, tan amante de su madre y tan señor e inteligente, pero, flojo como tú! Se muere por Santa Rita y cada vez que puede escaparse allá va a parar conmigo. El tata le ha regalado un caballo regio que cuida como a su mejor amigo.

Te diré que él ignora completamente la tragedia que nos ensombrece la vida, porque la Santa de su Madre nada le ha dicho y cuida de que no le llegue a sus oídos rumor alguno que pueda herir sus sentimientos respecto a ti a quien quiere y admira.

Tú me crees cómodamente sentada en un sillón sin imaginar la hecatombe que amenaza al mundo. ¡Qué equivocado estás! Todo lo veo negro. Creo que Dios, único Señor, y dueño de vidas está castigando al mundo permitiendo que reciban las consecuencias del crimen de lesa-Majestad de renegar de Él y siembra la confusión en el mundo entero: Hoy es un campamento de ciegos que en vano buscan el remedio porque el mal está en la raíz, es decir, en el alejamiento de Dios, en la falta de sometimiento a su Ley, única que consulta el orden y el lleno de las necesidades de la creatura y la limpieza de los sentimientos en la vida íntima: lo que lo hace diferente de los animales...

Todo esto me hace vivir en tembladera. No tengo más esperanza que en la protección de la Soberana de Chile nuestra Madre del Carmen. Ella nos ha salvado hasta aquí. ¡Ella nos salvará si nos mantenemos fieles! ¡A Ella clamo y sólo en Ella espero! ¡Pero con esperanza firme porque su auxilio es manifiesto!

Como ves ya mi pulso está de mal en peor. Si el procedimiento de la corriente Araya no   —123→   me mejora tendré que escribirte a máquina. Me cansa escribir y cada carta tiene varios días de labor. Tengo los centros nerviosos envenenados: no en vano se sufre y se sufre.

Encontré esa fotografía que me mandaste hace tiempo. ¿Son esas las que deseas? ¿Recibiste los libros y los dibujos que te mandé?

Ya no puedo mas con mi mano; adiós hijo de mi alma. Te abraza, te besa y te adora tu

Madre.

1 de Diciembre 1931

Hijo de mi alma: Estoy muy preocupada con esta Comisión de Control que me acaba de notificar no cuente seguros los 3 mil frs. del envío, pues no se sabe si habrá que apretar más. Piensa que la autorización hay que mandarla pedir mes a mes. Yo tiemblo cada primero no me vayan a salir con alguna restricción y tú te veas en apuros. Economiza todo lo que puedas a fin de evitarme esta preocupación que me amarga continuamente. ¡Dios ha de querer pase esta situación tan angustiosa! Búscate agencias de productos o de elementos nuevos para dar facilidades de vida, que es lo único con que se puede negociar hoy. Mucho te he dicho negocies en vino de Santa Rita cuya fama es reconocida como el mejor vino sudamericano. En Bolivia es el único americano que se consume. En Argentina, la cosecha ha sido pésima de modo que habría buen mercado, como también en Bélgica, en Dinamarca y Alemania según noticias últimas, pero, como los agentes son ladrones y especuladores en su mayoría, los negocios se hacen difíciles: le compran a la viña en l$ botella y la revenden en 12 bolivianos y viceversa, haciendo morir toda iniciativa por la codicia exagerada, pues, como consecuencia el público teme los precios altos.

El arreglo que yo había creído posible enviando el resto de la suma a otro nombre no se puede: habría que justificar que fuera pago de algo y todavía que lo encontraran razonable. ¡¡Creo que en Rusia debe ser así!! ¡¡En esa Rusia modelo de libertad y de respeto a la dignidad humana!! ¿Dónde iremos a parar?

  —124→  

¿Cómo estás? Nada me dices de tu salud, de tus proyectos, de tu espíritu. ¡Yo decayendo, es tiempo! Lo siento por ti. ¡Te haré falta! El amor siempre alivia y deja un vacío negro y hondo.

Los tuyos están bien, gracias a Dios, menos Manuelita cada vez más deshecha lo que pone un encanto especial a su principesca personalidad. Vicentito termina este año sus estudios de humanidades; simpatiza con la ingeniería para lo cual tiene cabeza, pero le falta constancia: ¡hijo de su padre! perezoso y encantador. Yo le aconsejo estudie comercio porque es sumamente busquilla. Se sabe manejar y emprende sus negocitos de manera hábil: fabrica cigarrillos, es agente de medios de economizadores de bencina de una sociedad de ladrillos, etc. Me da gusto verlo tan inteligente y tan amante de su madrecita. ¡Dios lo bendiga! ¡Las niñitas cada día más interesantes, tan buenas, inteligentes y preciosas!, ¡pero, sin papá!, a quien esperan siempre con el mismo amor.

¡Cuídate mucho, que la Santísima Virgen te traiga a mis brazos! ¡Adiós niño mío adorado! Te abraza, te besa y te bendice tu Madre.

  —125→  

Abril -1932- Santiago

Hijo mío: No contesté tu penúltima carta por insolente; todo lo que siempre te digo y te diré es por tu bien y con el pensamiento de que algún día puedas rehacer tu hogar. Las frases nada me pueden de modo que tus burlas se quedan en el papel: lo que hiere es tu incomprensión y los aires que te das de intangibilidad. Debes saber, hijo de mi alma que Dios me ha dado bastante talento para no creerme bajo cero ante ti. A Él agradezco el que a ti te dio y no cesó de pedirle lo aproveches en conocerlo y darlo a conocer; y no en cerrar las compuertas de la verdad tan sólo porque así conviene a tu modo absurdo de vivir. ¡Eso del atraso en que nos encuentra la llamada evolución de las ideas me tiene muy sin cuidado! Estoy dispuesta a padecer y a morir por Cristo Señor del mundo. Si Él me ha escogido para mártir ¡Aquí me tiene! Nunca aceptaré como correcta la animalidad, la abolición del hogar y la instrucción del Estado en la educación y en la vida privada. Para eso están los Mandamientos con todo el libre albedrío del cual sólo a Cristo Rey y Soberano y Creador de todo lo que existe debemos cuenta.

¿Cómo puedes tú pensar que con todo el inmenso amor que te tengo, vaya a serme indiferente tu presente y la eternidad de tu vida futura? Vivo en la certidumbre de que pagaremos en la otra vida los males que hemos hecho; que existen las penas, el dolor eterno y que no vale nada el goce pasajero comparado con el más allá.

Tú crees en Dios aunque te eches polvo a los ojos, porque no se borra por capricho o por soberbia lo que se bebió antes de ver la luz. Los pecados de miseria humana como llamaba el gran tío Rafael, a tus fallas no son lo que Dios castiga más, sino contra la Fe, la negación de Él, siempre que se lleve dentro la semilla del conocimiento, semilla de que sólo puede carecer un idiota, un loco o uno que jamás haya oído nombrar al Creador. ¡No puedo catalogarte en ese número, por consiguiente espero tu vuelta! ¡Espero verte en el cielo alabando al que te llenó de beneficios que ni tú ni yo merecemos, pero que merecen tus antepasados! Fuera de la Ley de Cristo no hay paz. Él, sólo defiende tus derechos espirituales de felicidad imperecedera, y de la poca felicidad que nos depara la vida terrestre. ¡Que tu Madre del cielo te abra los ojos! ¡Eres suyo!

Cuando no te llegue a tiempo el dinero no pienses sino en las dificultades cada vez mayores por que atraviesa el país. Yo te pregunto, ¿que harás el día en que los comunistas nos despojen cuanto nos queda y no tengamos qué mandarte? Muchas veces te he hablado del pésimo estado de nuestras finanzas y te extraña no se te manden de golpe cuarenta mil francos. Para lo que yo te mando tengo que arañar y luchar como negra. Ayer me dijo Amelia se hablaba de suprimir la renta del Portal, que es de donde yo obtengo ese dinero; además el franco; con la especulación ya vale 86   —126→   centavos en vez de 32 que valía antes. La prudencia aconseja vaya reduciendo tus gastos y guardando lo más que puedas para ponerte al abrigo del hambre. Como puedes comprender estas cosas agravan mi salud, lo cual es de ninguna importancia para ti. El Delbiarre y la supresión de la morfina, nada han logrado: voy de mal en peor a juzgar por la alarma que leo en el semblante de los que me quieren y que se puede decir sirven para mí preocupándose minuto a minuto con una ternura conmovedora.

El vino aún no es posible mandártelo, porque la Comisión de Control exige vuelva al país todo el precio de las ventas. Además tu papá no cree mucho en tu dedicación a negocios a juzgar por las demostraciones, dice que hacer dinero con base de capitales no es demostrar competencia comercial y que en tantos años no has hecho nada, en cambio que tus hermanos se ganan la vida con su trabajo inteligente y tenaz. Ojalá se equivoque y puedas probarle tus aptitudes financistas, pues, de las otras él no duda reconociéndote capaz y dedicado pero no productivo.

Adiós, hijo muy querido. Que Dios y la Santísima Virgen te guarden y que yo te vea cuanto antes.

Te abraza, te besa y te bendice tu

Madre

Con toda el alma

Una letra por dos mil francos que se te mandó por avión, se perdió junto con el aparato, pero inmediatamente que se supo se renovó y se envió por vapor, no sé si la recibiste. Avisa. Otro abrazo.

¿Qué irá a suceder? ¡Dios está con nosotros!

  —127→  

[21 de abril de 1932]

Hijo mío: Espero habrás recibido las libras que se dio orden de entregarte por medio de Olaf Seback de Copenhague -40 libras-. Esta Casa continuará sirviendo tu renta, gracias a un negocio que se hizo con ellos y cuyo dinero no alcanzaron a mandar. Te mando esa letra por libras correspondiente a mayo. Los mil francos que te mandé sufrieron la fatalidad del incendio del avión; se dijo que la correspondencia se había salvado, pero después supimos se había perdido.

Verdaderamente no comprendo puedas pasar tantas angustias habiéndote entregado Ismael 1.800 pesetas y 500 más Primo de Rivera. Te repito lo que te digo en mi anterior, que guardes lo más que puedas, pues, no hay ninguna seguridad para el porvenir. Ya la renta del Portal me la suprimieron totalmente, gracias a la espléndida administración de tu finado tío Lucho Q.E.P.D. Estoy con ánimo de vender mis acciones para contar con algún capital y no pasar las angustias de cada día.

Ojalá no continúes escribiendo de un modo tan hiriente, lo cual me imposibilita de mostrar a tu papá tus cartas que lo molestarían como es natural. ¡¡Que eres el único inteligente y previsor de la familia!! ¡¡Ya lo has repetido hasta la saciedad!!

Los demás no tienen culpa y lo que es tú debías estarle a Dios muy agradecido por haberte exceptuado de ese mal de familia tan contagioso.

En el mes próximo ensayarán de mandarte vino para Holanda. Se han mandado hacer los barriles especiales; yo te avisaré. Tendrás una oportunidad de demostrar tus dotes comerciales. Espero que te lucirás.

Me preguntas sobre viaje a Chile ¿Y tienes corazón para hacerme esa pregunta, sabiendo cuán inmenso es mi cariño?

A cada momento le pido a la Virgen Santísima que me prolongue la vida hasta verte, hasta poderte ver feliz en tu hogar en medio de los tuyos y en mis brazos. Mi salud está por los suelos, mi enfermedad no tiene remedio, el sufrimiento me ha envenenado; ¡para sanar tendría que arrancarme del alma tantas preocupaciones y tener un respiro! Sin paréntesis -que fuera- de alegría. Y esa no me la puedes dar, sino tú y eso lo sabes bien, pero, yo no soy digna de que un hijo tan excepcional se preocupe, ni tengo derecho de enfermarme de pena.

¿Acaso mi hijo no es dueño de su libertad? ¿Acaso no es una peregrina ocurrencia la de sufrir, la de querer a un mayor de edad con todos los privilegios de libertad y del libre pensar? Así soy yo hijo de mi alma, un atado de aberraciones: esta es mi naturaleza ¿Qué importa?

  —128→  

No me hago daño sino a mí misma. Creo que mi vida llena de tristeza no te habrá dejado una noche sin dormir. Y para mí eso es lo esencial.

Mañita, se casa el 5 de mayo. Los niños bien, te abraza con toda el alma tu

Madre

Tu papá me dice ha habido un cambio y que será el Banco Francés Italiano, el que servirá tus 3.000 francos mensuales. No te mando la letra correspondiente a mayo porque lo ha impedido un trámite de última hora. El dinero no sufrirá atraso. Tengo el brazo tan cansado que no me permite escribir más.

Te besa de nuevo tu madre. Avisa sobre cualquier atraso y queda tranquilo.

  —129→  

21 abril - 1932

Ayer tuve la gran pena de leer la salida de Alfonso XIII91 de su España. ¡Salió como sale un Rey, con alma distinta a la de los que no se sospechan lo que es ser Rey! ¡Podrán fulminarlo, podrán vejarlo, pero siempre quedará en pie ese gesto caballeresco que sólo puede hacerlo él, porque si subió al trono fue porque era superior a los demás en sentimientos, en fuerza, en voluntad, en esa voluntad que Dios le pone al que creó para gobernar! El tal Alcalá Zamora no pasa de ser zarzamora con espinas venenosas y tal vez un señor que no vio otro camino de subir que el de hacerse republicano. Ya verá mi pobre España lo que es regirse por República, foco de ambiciosos etc.

De los tuyos no sé nada. Voy mañana a Santiago a ver médico aunque no creo en ellos. He notado que el abuso de athofan produce temblor en las piernas y en los brazos. ¡A no ser que sea otra cosa peor! Consúltalo para ti y turna esa medicina con Piperasine Midy que también también disuelve las piedras. El athofan debe tomarse siempre con un poco de bicarbonato.

¡Qué pena no tenerte aquí! ¡Todos te quieren tanto! Olvidaba lo más importante: Cacó, se acercó a mi oído la última vez que la vi y me dijo: «Dele a mi palacio un recado para el solo y nada más que de mi parte, que lo quiero con todo mi corazón y que se venga hoy mismo». Después añadió: «Dele también los recados de Marie Louise, pero los míos aparte».

¡Está tan preciosa, tan fina, tan mía y tuya!

Esas proporciones que dije de los quilates del oro son frutos de mi ignorancia: no son quilates son gramos de oro por kilo, lo que es fantástico. ¡Qué Dios bendiga el negocio una vez por todas y entonces si alcanzo iré a verte, compraré un departamento en París que es tu quebracabeza! ¡Cuántos castillos en el aire! Y de eso vivimos.

Mañana te mandaré los libros que me pides. No me dices nada de la escultura de Domingo ni del retrato de Marie Louise, tampoco me hablas sobre lo que te dijo de venta de vinos en Milán, ni si recibió los cajones que le mandé a tu nombre y al nuestro. Sería raro no los hubiera recibido siendo cónsul y habiéndolo enviado con toda clase de seguridades.

Estoy con el ánimo muy malo ¡Adiós! Te besa, te abraza, te adora tu

Madre

A Ismael que te entregue el libro de Casa-Real que es tuyo y ahora sin pleito somos los verdaderos marqueses comprobado por esos libros que ellos no podrán tener jamás, los usurpadores. ¡No hay bien que por mal no venga! No lo eches en saco roto ya que la renta de Casa-Real está en   —130→   nuestro poder y en adelante sería eso lo que quede, fuera de la satisfacción de usar el título sin que nadie tenga derecho de reclamarlo.

¡Otro gran beso! Me tiembla mucho el brazo -hijito mío de mi alma.

Como creo regresarás pronto a París allí encontrarás tu dinero como siempre y te ruego si me quieres no trabajes contra la monarquía, lo único decente y ordenado.

Antes de cerrar recibo cable de Roberto Suárez pidiendo fondos para ti. A Madrid Legación de Chile. Mucho siento te encuentres metido entre la mugre triunfante y sólo te he enviado unas pesetas pensando estás apurado, pero con suma repugnancia pues yo moriré monarquista y no pienso contribuir ni con ínfima parte a convertir en esclavo al pueblo español.

Ya te he dicho que por ahora la situación nuestra es pésima, que nada se vende, etc. Lo de la mina es para el porvenir, es fantásticamente rica pero no será para servir al Soviet, sino a Dios nuestro Señor.

Aprovecha el tiempo para recoger el libro de Casa-Real y si no lo quieres conservar, mándamelo con el primer viajero de tu confianza.

Quedo muy apenada con tu actitud de revuelta.

Como siempre te besa tu madre que te quiere mucho.

  —131→  

18 mayo -1932

¡Hijo mío de mi alma! ¿Cómo puedes creer que tú deseas más verme que yo a ti, cuando mi pensamiento vive contigo y es mi mejor anhelo tenerte conmigo, verte, oírte, besarte sin fin?... No creas que en tus hijos ha disminuido el cariño por ti. La Manola te admira. Marie Louise y Cacó, se enternecen, les brillan los ojitos cuando les leo párrafos de tus cartas. Cacó termina siempre con estas palabras: «Dígale que se venga, ligerito». -El Tito como te he dicho ignora la tragedia del abandono... pero ya lo sabe. Jamás le he oído una palabra en pro ni en contra. Manuelita, guarda un silencio solemne: nadie y mucho menos yo, penetra en su interior, área cerrada. Te he dicho que a mí me tiene distanciada porque me cree parcial. Nunca ha venido a casa, pero, yo voy a verla para no cortar los lazos y ver a mis niñitas adoradas que pasan el domingo conmigo. También suelen venir en la semana a probarse sus toillete en el taller de la Clotilde, y pasan a darme un beso. Cada una en su género es estupenda. Marie Louise, es espiritualmente todo lo más perfecto que hay: fina, discreta, aristocrática de raza, es decir, con todas las delicadezas que caben en el alma humana. Ella es la dueña de casa, por su espíritu de sacrificio; ella siempre se coloca debajo de todo pero su superioridad la hace sobresalir: ¡no se esconde la luz! Cacó, es de una femineidad completa: ¡querendona, delicada, necesita ternura especial y es tan inteligente y tan linda y tan propia para hermosear la vida y hacer la carga ligera!

Tus hermanos te quieren. Ahora no hay que exigir que se degraden al extremo de ser insensibles al atropello. Claro que Rafael, que tanto te ha querido, te guarda distancia, porque aún cuando medie una pasión, escogiste lo más sensible: ¡su familia! Y él adora a su mujer.

¡De eso tú no te darás nunca por entendido porque según tu autobiografía en Gilles de Raíz, naciste para escupir en los espacios infinitos y que te dieran las gracias por haber puesto los ojos allí!...

Nadie te ha puesto barreras; eres tú quien se ha alzado en armas contra las leyes divinas. La nueva orientación obrará en los espíritus rebeldes, en los que tienen cuentas pendientes con el orden y con Dios. Autor de la paz y de la justicia, pero, no arrastrará a los que están en la verdad. El haber pecado no justifica, ante un alma noble, la falta; de humanos es errar y de gente de alteza espiritual reconocer sus yerros.

Dios, misericordia infinita, nos concedió el recurso del arrepentimiento. ¡De Él desciende el perdón que nos lleva a la esperanza!

¡Sin esperanza qué vale la vida?

Desde que me levanto hasta que me duermo rezo estas palabras: «¡Perdónalo Señor, devuélvemelo! ¡Conserva su cuerpo sano y que reorganice su hogar según Tu Corazón!»

Adiós niño mío adorado. Piensa que nadie te quiere más en la vida que tu madre y tus hijitas

Con amor eterno

  —132→  

Mayo 1932

Hijito mío:

Va la segunda de cambio por si se ha perdido la que te mandé por conducto de Enriqueta Petit -vía aérea- ¿Cómo estás? ¿Piensas alguna vez en tu vieja que te adora?

Y te besa con toda el alma

Tu Madre

¡Hijito querido! ¿Quieres verme? ¿Me necesitas?, llámame, si de algo puedo servirte en cuanto al corazón.

Te ruego no cuentes a nadie que te mando dinero; créeme que todo llega aquí y no quiero ofender a quien tú sabes y que sólo merece respeto y amor. Si ella creyera que tú necesitabas estoy segura que se privaría de todo antes que tolerar la idea de que sufrieras, pero, no me perdonaría a mí. Ella no conoce aún los sufrimientos de Madre y el Señor ha de querer no los conozca jamás. En su estado tan doloroso lo tomaría como un atropello, como una complicidad, etc.

Yo no sé si tú careces de dinero: la idea sola de que puedas tener alguna necesidad, que te enfermes y no tengas los medios para curarte, me tortura de tal suerte que me he puesto en un estado semi-salvaje intratable.

Y ya que Jesucristo no me prohíbe ser humano y ha sido Él quien me ha puesto este amor por ti en el alma, desahogaré mi maternidad, me aliviaré del peso inhumano de tu ausencia velando por ti, ¡Vicentito mío, adorado!

He estado al borde de embarcarme con Sara del Campo, pero me detiene la idea de que yo no te daría placer viéndome; tal vez, me juzgarías mal -detective- dirías pensando en que los otros se van en junio, cualquiera cosa que sucediera dirías sin compasión: ¡Mi mamá!... ¡Mi mamá fue!

No Vicente, ya no puedo remediar nada ¿a qué conduciría entonces hacerme aún mas odiosa para ti?

¡Recuérdame, piensa alguna vez en esta pobre vieja que daría toda su sangre por verte en el sendero de Dios y feliz! Sí, todo lo feliz que se puede ser en este destierro.

¡Recuérdame con una Ave María, a la Madre del Cielo que quisiste tan dulce, tan poéticamente cuando eras mi niño -mi maravilloso- y te podía besar hasta la locura!

¡Adiós, hijo mío! mío!

  —133→  

[29 de Junio 1932]

Hijo de mi alma: ¿Qué decirte del momento porque atravesamos? ¡Chile se hunde! ¿Qué capital extranjera querrá venir en auxilio de nuestras finanzas, cuando estamos entregados al pillaje? Hay necesidad de afianzar con pagos en dinero contante y sonante a los defensores de la patria. ¿De dónde sacarlo? Del bolsillo de los que tienen dinero alcanzado con el trabajo de toda una vida... y de esas pobres mujeres que viven de la rentita infeliz de alguna propiedad.

Grove, pasó por la Moneda sembrando el pavor; creyendo acoquinar a la vejada oligarquía con la amenaza comunista que en unos cuantos días se extendió como mancha de aceite.

Olvidó que todos somos de la misma raza y que correría mucha sangre antes de capitular. Salió como entró: de la mañana a la noche, vejado, llamado traidor por sus mismos compañeros de armas. Se dijo que se había vencido a Rusia ¡No lo creo!

Hasta este momento reina Dávila, no es que cuente con apoyo sólido, pero es hábil ¿Qué vendrá mañana? ¡Sólo Dios sabe!

Yo querría un gobierno fuerte espaldeado(sic) por los militares pundonorosos que aún queden. Los que no sean vendibles para mayor vergüenza de Chile. ¡A dónde hemos llegado! Si resucitará Portales se sonrojaría de esa agrupación purificada por él y que hoy se cotiza en la Bolsa... ¡Pobre Chile!

Qué talentosas las ideas de Napoleón92: Todos se venden.

¡Es cuestión de precio y de oportunidad!

Yoaco, ya sabrás está de Intendente de Santiago. Puedo asegurarte es el más honrado, el más noble y el que ha prestado mayor servicio a la revolución. Pero como su raza no le permite pedir, le darán con un puestecito de tercera clase, pues los bocados suculentos son para los vampiros que los hay más ahora que nunca.

Supongo el Anglo te habrá entregado el dinero que te faltaba. En adelante servirá el total, el otro. El vino irá también: tu Papá dio la orden. Yo te avisaré el momento de la salida. ¿Por qué no le pides a tu amigo Dávila o a su mujer algún puesto que garantice la tranquilidad? Ya sabes las dificultades, el costo cada vez más alto del franco y el estado de nuestras finanzas que empeoran seguramente con las contribuciones de asalto que cobrarán a cuenta de la muerte del salitre. ¡Todo se ve negro! La situación del pueblo no mejorará porque si no hay, con qué pagar, se cerrarán fábricas, etc. El Estado socialista es sólo un ideal que no pudo realizar ni Platón...

Esto que está pasando es sólo cambio de personal. No se enriquece un país con empobrecer a los ciudadanos. Se enriquecerán cuatro gatos dirigentes y cuando estén hartos de sorber   —134→   vendrán otros, etc. No ha nacido el genio que descubra un sistema de perfecta igualdad. Sólo existe en la ley de Cristo y en la vida futura.

Manuelita fue muy partidaria de Grove; tenía amistad con él y su mujer: ha sufrido con la caída.

Las niñitas están muy politiqueras y por ahora engripadas. ¿Y tú hijo de mi alma?

Piensa en tu madre que te adora y pide a la Santísima Virgen te devuelva a mis brazos ya tan debilitados.

Te abraza y te besa tu

Madre

29 Junio 1932.

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[19 de julio de 1932]

Hijo mío de mi alma: ¡Cómo te recuerdo y cómo te quiero! ¡Este acabo de vida que debíamos concluir sonriente, con los hijos alrededor y tenerte tan lejos por un capricho tonto de la carne! ¡Tú, con arranques espirituales altísimos, dominado por la manteca! ¡Qué miserable es la vida, y como hace pensar no nacimos para ésta, sino para vivir vida eterna! Y tú que piensas tanto, te quedas detenido con la materia, en el forro de tu espiritualidad avanzada, avanzada para las ideas locas y que no dejas surgir sino lo extremadamente vulgar. Desde que el mundo existe, el amor ha arrojado a la ruina a los que atrae a su perdición y tú que te crees invulnerable te dejas arrastrar por una quimera y abandonas lo único estable: la paternidad; el lazo de la sangre, estos hijos que no cesan de quererte con todas tus caídas, porque sí. Ese es el único lazo, el que no muere. Todo lo que prende en el espíritu emana de Dios. Él inventó la familia y de allí el sentimiento eterno que amarra y encadena y señala la vida futura como único ideal digno de vivirse. ¡Por eso el Soviet no logrará vivir: porque es la ruptura de todo ideal y el alma no puede alentar sin ideal!

¡Estamos atravesando por un período de locura, Chile está podrido! Los ejércitos que eran orgullos de la Patria, es hoy motivo de oprobio; se les puede aplicar el pensamiento desencantado de Napoleón: «todo se vende. Es cuestión de oportunidad y de cantidad».

Si Dávila no hubiera encabezado este movimiento con doctrina soviética -aun cuando sea para atraerse al pueblo- sería un gran presidente porque talento y astucia le sobra. Nadie puede hacer milagros: Chile está herido en su vida financiera, pero no resucitará con impuestos groseros a los millonarios que ha contado sino con protección eficaz a la agricultura y a la minería. En vez de ahorcar a los pocos que quedan en pie, deben ayudar a las multitudes que quieren trabajar.

El dinero es de todos, pero, si se inician robando, lo único que obtendrán es la ruina colectiva: la hecatombe general.

Todos los días esperamos aviso de nueva invasión de los poderes públicos. No falta quien encuentre latoso varios días de orden. ¿A qué extremo hemos llegado?

Tu carta a la Sra. de Dávila la mandé, no sé si la recibió, tú sabes que cuando una persona ambiciosa se sienta en la altura pierde el control de sí mismo y se cree cumbre.

Yo no deseo humillar a nadie, el talento me merece estimación, pero no tolero se me monten en la nariz. Pertenezco a raza real y con ella me quedo acariciando las barbas de mi antepasado Alfonso el Sabio93 cuya sangre llevo pese a quien pese. Admito las dinastías que comienzan, pero me impongo sobre ellas, a pesar de que «la vie commence demain». -Si no se escribe así corrígelo-.

  —136→  

Los tuyos encantadores: Carmen, maravillosa y tierna, Marie Louise refinada, Manola apasionada -te admira literalmente- Vicentito, el hombre del día.

El vino aún no sale: Ça viendra.

¡Que pases buenas vacaciones! ¡Que yo te vea antes de morir y que la Santísima Virgen te guarde con misericordia de madre!

Te abraza, te besa y te bendice tu

Madre.

19 julio -1932- Santiago de Chile.

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4 -Diciembre- 1932. Santiago

Hijo mío de mi alma: ¿Qué te pasa? Dime con exactitud tu estado, pues, cueste lo que cueste estaré siempre a tu lado. Dime si debo ir.

¿Por qué no te viniste por el Pacífico? Eso era lo cuerdo, entonces debía suceder lo contrario: no te habrías enfermado y yo podría morir tranquila habiéndote abrazado.

¡Mi destino es sufrir, ser la piedra esquina donde se destroza el corazón, reo de todas las injusticias!

¡Qué hacer! El tío Rafael, gran cerebro, grande de alma, me decía: «¡El que cede es el triunfador, el más noble!» -Y yo me acostumbré a ser siempre la víctima seducida con esa seguridad del triunfo espiritual.

Ahora te espero soñando con la única gran felicidad que me depara la vida: ¡tenerte muy apretado contra mi corazón!, y que arda Troya.

Por el avión te escribí al Anglo, única dirección que recibo de ti. Ninguna otra carta he recibido de Europa.

Vente luego, no retardes más esta ausencia tan penosa. Si es necesario vender ruiseñores ¡Qué hacerle! Lo sentiré sólo por ti. Esta crisis que nos golpea no alcanza a enturbiar el placer de estar cerca de ti.

Que la Sma. Virgen en cuyo mes estamos te sane y te devuelva a mi amor para no separarnos más.

Tuya tu Madre que te adora.

  —138→  

[11 de enero de 1933]

Hijo mío: ¡Mala noticia! El ruiseñor que tú creías aguachado estaba enfermo y amaneció muerto.

Llamé a tu dirección y me dijeron habías salido; quería preguntarte qué hago con la hembrita huérfana, si te parece juntarla con los otros.

Los tres que quedan se ven vivarachos. Creo que el ruiseñor murió de empacho con esos pedazotes de carne que traían.

Aquí hago moler la carne a máquina y además la desmenuzo con los dedos. Desde hoy les daré gusanos. En fin hijo mío ten seguridad de que haré lo posible por conservártelos ya has querido cantar por esas gargantas ideales.

¡Una noche más en tu poder y no habría yo tenido la pena de causarte pena!

Contéstame aquí a Sta. Rita, y dime cuándo nos podremos ver.

Te abraza con toda el alma

Tu Madre

Miércoles 11 Enero 1933

Desde Santiago nos turnamos con tu Papá para traer las jaulas en el aire, prueba de ello que los demás no han sufrido.

¡Qué hacer! Hay seres que no resisten la jaula... Los ruiseñores no serán nunca comunistas...

¿Cómo estás?

Dime si les conviene el sol. Los tengo colgados de una encina a mi vista: ¡son un pedazo tuyo!

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7 febrero 1934 - Llolleo

¡Hijo mío, tan mío!

Gracias por tu respuesta. No podía ser de otro modo.

Fue el cuidador -a quien no conozco- quién metió el boche...

Antes de irte mándame la dirección por si necesito comunicarme contigo.

Insisto en que te busques una casa con jardín donde puedas entretenerte los ratos en que tu cerebro necesite reposo.

¿Mi salud? ¡No sé qué decirte! El sábado hicieron venir de Santiago al doctor Espíldora: me tomó la presión en la cabeza y tus hermanas dicen la encontró bien. Ayer vino el Dr. Renso, es decir: el divino botón.

Hoy no me siento bien. ¿Qué hacer? Dios dispondrá. Iría a Santiago para verte antes de tu partida pero no me atrevo por el marco que se me reprodujo a la vuelta aquí. -A la vejez viruelas.-

El temblequeo del brazo no me permite alargarme. Recibe el corazón tan mal ferido de tu

Madre



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ArribaAbajoCartas sin data de María Luisa Fernández a Vicente Huidobro

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ArribaAbajoCarta Nº 1

Hijo mío querido de mi alma:

Cierto, que es duro tenerte lejos materialmente, pero, la idea de que tu salud mejora compensa todos mis sacrificios.

Me haces feliz con lo que me dices de tu Cid. No dudo sobrepase lo que has escrito antes, pues, tengo mucha ilusión por tu cerebro ¡¡¡que ojalá «conserves»!!!

Lo único que me preocupa es tenerte lejos de mí, es decir, solo, del amor de los amores... del que nunca ni por ningún motivo puede morir y pensar que en un corto plazo me dejaras ir... para no volver.

Estoy desde el lunes en Avenida Suffren 55 -5 piso- muy bien en cuanto a luz y aire... muy mal en lo referente a servidumbre, pues, hasta hoy 22 de agosto, no he tenido de quien valerme y yo hago nuestra comida.

Nos divertimos con María, tan sabia como yo en el arte culinario. Tomé una española que me salió desbarrajada -24 horas de inquietud-.

Mañana si Dios quiere, tendré alivio: una vieja francesa recomendada por condesas, baronesas, generales, etc., etc.

¡Recibí cartas de Chile: todos me llaman!

Que Dios y la Santísima Virgen te guarden. Te besa con toda el alma tu

Madre

Haré diligencia del departamentito.

Rue Vanean 70.

Cuídate mucho: no suprimas nada del Cid: hay quienes te comprenden. ¿Acaso fuera de tu público intelectual, no existimos Manuelita y yo? ¿Y tu Manola que paladea cada expresión de su papá, para ella genial? Su corazón lo guardará para siempre. Ojalá lo traigas concluido y yo alcance a gozarlo, niño mío, mío, mío.

Muchos, muchos besos de tu madre que te adora.

¿Has tomado el remedio?



  —143→  

ArribaAbajoCarta Nº 2

Hijo mío:

Hasta ahora nada, nada, ni una letra tuya que me diga que me quieres.

¿Por qué desconfías de mí? Cómo podría hacerte daño, Vicente, niño mío, adorado. No ves que el dolor sería infinitamente mayor para mí.

No comprendo cómo estoy aquí separada de ti. Si no me he ido a verte es tan sólo por no darte un mal rato. ¿Por qué creerías en un complot? ¡No temas, Vicente!, yo jamás me mezclaré en tus asuntos, a no ser que tú me lo pidas, y para salvarte de dificultades.

Te mando ese recorte de una revista titulada «Revistas de Germán List Arzubide» Apartado 71 Xalapal Ven., Méjico. Va, como un beso largo y profundo mío, capaz de dulcificar tu vida ¡Cómo te quiero! y ¡Cómo sufro! Según el estado de mi ánimo, el tuyo debe estar oprimido, muy oprimido.

¡Siquiera he leído tu nombre querido en alguna parte! tu nombre que llenaba las revistas... ¡tu nombre que será siempre para mí lo que ha sido! Sólo el corazón de la madre no puede sufrir mudanza, está escrito con tantas penas.

Te mandé mil francos por conducto de Enriqueta Petit de Vargas, dos mil por un cable a Liptchitz, ese grande y buen amigo que te quiere tiernamente y ahora te remito otros mil, al mismo nombre, pensando que no te agradará ir al Banco y sobre todo porque no se a dónde dirigírtelo.

Me muero de inquietud por ti, háblame chiquillo mío, no seas cruel con el corazón que nunca cesará de quererte hasta la desesperación.

Que la Santísima Virgen te guarde.

Te besa con toda el alma tu

Madre



  —144→  

ArribaAbajoCarta Nº 3

Hijo mío de mi alma: leí tu carta del 30 de octubre a tu papá y haré lo que pueda para cumplir tus deseos de dejar dinero de lado; me ayudarán tus hermanas en convencerlo de que se venda la propiedad de Morandé esq. Santo Domingo, las acciones del Portal -mi única renta-. ¡Todo lo que se pueda de Llolleo y mi quinta de Apoquindo! Que conservo solamente por Manuelita y por tus hijos que siempre van allá en el verano.

Me parece muy peligroso tu viaje a Angola por el china que tienes que atravesar plagado de miasmas y de enfermedades infecciosas. Piensa que tu vida es mi vida, qué sacaría con que no me mataran aquí si te perdiera para siempre. Busca otro punto más viable, no te precipites y si siempre piensas ir a Angola, busca la compañía de algún médico que se entusiasme con tu entusiasmo. Hazlo por mi tranquilidad que yo entre tanto rezaré a la Sma. Virgen por ti. Dile a Ella que te inspire y así acertarás seguramente.

Otra cosa, y esto es para mí indispensable: yo no viviría como animal, sin religión o bien teniendo que luchar contra ti para defender mis ideas. Tú te manifiestas loco por los rusos y yo creo que Rusia es el infierno. Allá se obliga a renegar de Dios para recibir la ración de hambre con que generosamente comparten el dinero esos santos de la corte de Satanás. Espero que Dios se muestre a los que lo adoramos y detenga la invasión demoníaca.

Si tú piensas hacer obra de ateísmo en esas tierras, yo entrego mi cabeza al verdugo, donde quiera que me encuentre la catástrofe, que según tú mismo lo dices sería ni más ni menos, el fin del mundo, pero a mí, lo que sea, me encontrará adorando a mi Señor a gritos, que se oigan en el cielo y en la tierra y en los espacios. ¡Tenemos un alma inmortal eso es lo que hay que defender: la eternidad!

Ven prevenido para pasar lo mejor que se pueda aquí y allá, me parece lo más cuerdo. Por eso te encuentro razón en preocuparte de la parte material, pero te ruego por el amor que te tengo no me pongas en el caso de verte condenado y condenado por resistencia a la gracia, porque digas lo que digas tú llevas a Cristo en el Alma. ¡No lo resistas! ¡piensa que su ley es de justicia y de amor! ¡la única! ¡la verdadera, la que explotan cuando les conviene! Los cuatro gatos que se han apoderado de la conciencia de los asnos, de los débiles, de los que sólo quieren gozar aquí abajo a costo del sufrimiento del prójimo.

Escríbeme seguido, tenme al corriente de tu empresa a ver qué se puede hacer.

Para que lo medites te contaré el milagro que vienen de presenciar más de 40 personas de tu conocimiento.

  —145→  

Estaba la mujer de Alessandri desahuciada, Pardo y otros médicos habían declarado que humanamente hablando la Rosa Ester no podía vivir, viéndola en estado comatoso ya sin conocimiento hacía 34 horas, el P. Uriarte del Corazón de María, le llevó la reliquia de San Judas Tadeo de quien ella era devota, se la aplicó a la boca y al momento abrió los ojos y comenzó a moverse. Dice el Padre -él fue quien lo contó aquí- que todos los cuarenta y tantos que habían en el dormitorio cayeron de rodillas, que los hijos se echaron sobre ella llorando y le juraron que irían con su madre a comulgar, todos sin excepción en el altar del Santo que había sido costeado por ella. Añade el Padre, que jamás de la vida podrá borrarse de su mente ese espectáculo, que los médicos -había cuatro en ese momento- lloraban reconociendo que aquello no tenía otra explicación que milagro. Esto pasó hace diez días más o menos y la Rosa Ester ha sido declarada fuera de peligro ¿Qué te parece?

Anda a Lourdes hijo de mi alma. Pide a tu Madrecita del cielo el milagro que quieras. Ella te lo concederá ¡Te lo prometo! Ensaya, niño mío adorado.

Tus niños están bien, gracias a Dios, pero yo estoy cada día peor de los riñones. Que sea lo que el Señor quiera, y que Él tome mi vida por la tuya y tu felicidad.

Adiós Hijito mío, no dejes de llevar médico a tu viaje, que tengo mucho miedo.

Alfonso Bulnes94 se portó muy raro respecto de mi libro, no tuve una sola palabra de gentileza, tal vez por su intimidad con Alone. Jaime Rodríguez ha escrito una correspondencia en que ni siquiera te nombra, lo cual me llama la atención, al único que alaba es a Alone. Por mar te mando una revista Letras en que hablan de ti -mal- y de tu hermano Domingo95, bien.

Recibe mis besos, mi cariño enfermo martirizado y horriblemente triste y todo lo mas tierno de tu pobre

Madre



  —146→  

ArribaAbajoCarta Nº 4

Hijo mío de mi alma: No quiero dejar pasar este avión, sin enviarte las instrucciones sobre lo que se ha hecho para el envío de dinero y para el vino que ojalá te resulte. Todo ha tenido que ceñirse a las exigencias del Control como lo verás. Te ruego no imaginarte sean medidas de desconfianza sino imposiciones imposibles de vencer a pesar de que tenemos la suerte de tener un pariente muy humano y señor en la nueva Comisión de Control: Alberto G-Huidobro Guzmán, que se ha portado muy comprensivo y nos promete zanjar todas las dificultades que estén en su mano.

Han permitido el envío de una suma que tal vez será de los 3.000 francos mensuales. En caso de ser un poco menor el caso está previsto y enterará la suma -del Anglo- el Banco Francés-italiano, ya esto es un triunfo que me da un poco de paz.

Estas gestiones que hay que hacer permanentemente obstaculizan el envío a tu nombre del vino, porque como no es él sólo -Alberto- quien tramita estas gestiones, ponen alertas a los demás, que, pueden pensar en una maniobra nuestra para aumentar, en forma de mercadería, mayor suma para ti de la acordada por la Comisión y naturalmente lo impedirían. Entonces para evitar complicaciones conviene que los vinos vayan a nombre del Cónsul respectivo: tú me lo indicarás a vuelta de correo. Para exportar esos vinos exigen que garanticemos nosotros por medio de una fianza que el valor de ellos vendrá al país en forma de moneda extranjera. Además, los documentos tienen que ir por conductos de un Banco a nombre, como te digo, del que tú indiques, sea el Cónsul en Rotterdam o quien sea. Esos documentos sólo pueden ser retirados allá, pagando todo el valor que representa; o aceptando la letra a tantos días de plazo. Ya ves como no se ponen dificultades sino que se batalla en tu familia, por darte gusto. Los primeros pasos son penosos pero después se camina solo.

Sobre la comisión, fija tú como quieras, pues mi intención es te quede lo más posible, ya que en ello está tu negocio y tu bienestar. No olvides contestar a vuelta de correo a fin de comenzar cuanto antes.

Los tuyos bien gracias al Señor y a la Sma. Virgen.

No te escribo más por el brazo, me duele y me baila... jazz...

Dios nuestro Señor te guarde. Por mi parte recibe abrazos y besos y todo mi inmenso cariño.

Tu Madre



  —147→  

ArribaAbajoCarta Nº 5

Hijo mío de mi alma: Sentí mucho el atraso en llegarte el cable no sólo por que deseaba verte cuanto antes, sino por la razón suprema de que no disponemos de un solo centavo más que el enviado, que nos cuesta sacrificios que no puedes o no quieres comprender. La situación es desesperante, como te lo digo en mi anterior: el Control de Cambio no concede letras sea porque no tiene o porque los artículos de primera necesidad las exigen a costa del hambre de Chile. Adolfo, consiguió gracias a reiteradas gestiones arreglar el asunto entregándote esas libras de Dinamarca y el pasaje en esa Compañía de Vapores, que es la mejor, dejando pendiente el pago mientras el Control de Cambio diera su visto bueno. Dado el atraso de tu viaje ha habido que rehacer el trabajo -obra de romanos- y pedir el favor a la casa Ardity y Carry sucesores de Víctor Carry y familia 15 rue du Conservatore, París, de que te entregue las 56 libras o su equivalente contra recibo a lo cual ha accedido gracias a las diligencias de Adolfo que no ha omitido sacrificios.

Quiero comprendas bien, no tenemos medio posible para enviar ni un centavo más. Si te vienes vía Buenos Aires, lo cual es mucho más costoso y mucho más complicado, no cuentes con más dinero porque no sólo el control se niega a dar, sino también nosotros no tenemos más aunque te parezca raro.

Te he puesto al corriente de nuestra situación financiera desde hace algún tiempo y debes pensar no venderemos una propiedad para satisfacer un absurdo: hay muchos vapores, no ingleses, que vienen por el Pacífico y muy buenos, entre otros, italianos y alemanes. Lo del pasaje de segunda, te diré que todos los chilenos llegan en ellos. Tienes de la Compañía Inglesa el Orduña; en fin tú verás el modo de arreglarte sin emprender viajes que nosotros no tenemos cómo pagar. La permanencia forzosa en Buenos Aires es sumamente cara, el viaje hasta acá lleno de complicaciones también vale mucho dinero y lo que es el Trasandino no piensa en correr. ¡Pero si el dinero te alcanza para esos gastos, allá tú!

Piensa bien tu itinerario niño de mi alma y no produzcas una situación imposible de resolver.

No tomes a tus padres como comerciantes turcos, de los que esconden el dinero: cuando tu madre te dice que no hay más es porque es así. Nunca te he escatimado el dinero ¡bien lo sabes!

Llega en este momento Adolfo de hacer las múltiples diligencias ocasionadas por tu resolución de no tomar vapor inglés. El Control de Cambio no concede dinero para pasajes sino directos a Chile, es decir, por el Pacífico. Las 56 libras que debíamos al favor de la Compañía Inglesa no las concede para otros itinerarios, de modo que la solución o mejor dicho el traspaso a otra línea de   —148→   vapores nos encarece tu pasaje en 10 mil pesos. Se venderán algunos muebles antiguos para saldar la cuenta. ¿Comprendes ahora el sacrificio que cuesta este cambio? Ha habido que depositar estas prendas porque ahora nadie fía y el buen nombre de tu padre no es suficiente a las garantías que se exigen. Vives en el mejor de los mundos, sueñas con las revueltas pero te pones al margen de la hecatombe que significa para tu familia tus gastos inoficiosos. Te vuelvo a repetir: no cuentes con un céntimo más; no contraigas deudas que nosotros no pagaremos. ¡¡¡No me confundas con la tía C. R. que ya no se viste por mantener a los que la han liquidado, acto hermoso, pero propio de idiota!!! ¡Te adoro, pero si veo que no tomas en cuenta para nada a tus padres, hijos y hermanos; que no te importa lo que nos significa tu capricho, siento que una fuerza nueva me sostiene en mi resolución de no seguir destruyendo la casa que es de todos: tuya y de los demás!

Concluyo diciéndote nuevamente: ven por el Pacífico, que cuesta menos: no encarezcas tu viaje inútilmente y sobre todo ten bien entendido que no te podremos enviar dinero a Buenos Aires, ni pagar deudas contraídas. Te hemos enviado más que suficiente para tu pasaje, gracias al dinero que teníamos allá: los gastos superfluos corren de tu cuenta.

El nacional vale 15 pesos chilenos. Te abraza, te besa y te adora tu

Madre

Nuevos datos: Vapor Alemán Askania sale de Amberes el 22 de octubre, llega a Valparaíso el 4 de diciembre. Cuesta 170 dólares o sea 35 libras. Y como no hay más dinero creo que te conviene. Te abraza tu Madre.



  —149→  

ArribaAbajoCarta Nº 6

Hijo mío: Te mando el retrato de tu tatarabuelo don Manuel de Valledor, calcado por mí sobre la fotografía del cuadro existente en la familia.

Creo te agradará ya que según tú, vienen de un señor pirata francés...

Como se ve era caballero de la Real Orden de Carlos III. Me quedó bien igual.

¿Cómo estás, Hijito de mi alma? Tu última carta me ha dejado inquieta comprendo tu estado nervioso separado de todos los que te queremos ahora y siempre. Es imposible no sentir lo que se te envía en cada latido!

Ha habido una epidemia de escarlatina que no ha quedado casa sin enfermos, sobre todo los niños. Gracias al Señor a quien tanto debemos y a la protección manifiesta de la Santísima Virgen no ha caído ninguno de aquí ni de tu casa a pesar de su asistencia a los colegios en que hubo momentos se pensó cerrarlos.

Al frente en casa de tu tío Fernando la han atrapado, en casa de Carmen Rosa ¡Quién no ha caído! Solamente nosotros ¿Por qué? Porque nuestra casa está sellada con la sangre del cordero divino. Piensa un poco en los favores que en cada instante recibimos ¿Recibiría Anita Penna una carta que le escribí? Muy tarde fue pero más vale eso que nunca. Había perdido la dirección.

Tu papá desea saber si aún no se ha vendido el cuadro que se llama «Cani» de Cormon, y que estuvo expuesto en el Luxemburgo, pero que ya lo sacaron y lo tenían en venta en mi último viaje, averígualo.

Muchos saludos a todos tus amigos Liptchitz, Cotapos, Penna ¡Quién pensaría te sientas mejor entre ellos que entre los tuyos! Y mira que personajes tan deslumbradores.

Se publicó un artículo en El Mercurio de la Mistral96 haciéndole la pata a la Condesa de Noailles97 ¿Has visto cómo una anarquista se convierte en carne de una noble? Allí tienes a Bernard Shaw98 a quien han hecho caballero y por petición de los laboristas...

¡Qué arraigo en las ideas! Más vale ser rancia, pasada de moda y vivir en las altas cumbres del aislamiento lejos de todo lo que huele a Dinamarca.

Adiós mi hijito querido, te abrazo y te beso en unión de tus maravillosos hijos y que la Mamita Virgen te traiga luego, antes que yo dé vuelta la esquina.

Tuya tu Madre.



  —150→  

ArribaAbajoCarta Nº 7

Hijo de mi alma: mis aprensiones se han cumplido. Le remito la carta misma que me notifica de algo inaudito, medida canallesca que viene a agregarse a las calamidades que nos agotan y que a nada conducen. ¡Sólo en Rusia se esclaviza en esta forma! Mi desesperación es tanta que fui a hablar con los de la Comisión de Control y no pudiendo contenerme rompí en llanto. Dios, me las enviaría -esas lágrimas- pues gracias a ellas Álvaro Orrego, después de negarse a todo, le entró compasión y me envió una carta que no te remito porque me puede servir, en que me concede el envió de 2.500 francos pero advirtiéndome que esto sufrirá nuevas restricciones en adelante hasta llegar a la supresión. Adolfo, que es un gran señor, se echó a buscar francos que poder enviarte para enterar algo de la suma restante y consiguió la letra que te remito por vapor y en carta certificada de 424 francos que es todo lo que se ha podido encontrar de contrabando. Como ves la situación se hace insostenible y es necesario pienses en el modo de remediarlo. Hice hablar a D. Domingo sobre esto a fin de que por su parte haga envío de dinero a su hija, pues, él puede remitir alguna suma. Creo indispensable que la persona ésa pida dinero a los suyos, pues el padre de ella se manifestó dispuesto. Además estudiamos si se puede abrir una cuenta allá en el Anglo para servir tu renta: es idea de Adolfo, aceptada aquí por el Banco pero en la cual no le cabe otra intervención que la de recomendar la firma. Te repito lo que te dije en mi anterior: busca a alguien que tenga dinero allá y aquí a fin de que pudiéramos depositar en su cuenta de Chile lo que te prestaran allá, sin perjuicio alguno hasta el momento en que estos idiotas discurran alguna medida capaz de hacer posible la vida. No te diré como nos apretamos aquí: Chita corre con la casa y nos tiene al día. ¿A dónde iremos a parar? ¡Sólo el Señor lo sabe! ¡Confío como siempre en mi Madre del cielo! Si esta situación referente a ti empeorara no queda otro recurso que el de regresar a Chile, pues bien claro lo dice la presente. Piensa tú también, que para eso Dios te dio talento y si algo se te ocurre para remediar esta situación tan penosa para mi corazón dímela sin retardo, a vuelta de correo.

Adiós mi niño mío adorado, te abraza, te besa y te adora tu

Madre

Acúsame recibo de la letra pues a pesar del certificado no quedo tranquila.



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ArribaAbajoCarta Nº 8

Hijo de mi alma: Aquí en Llolleo recibo tu carta por la cual veo no te puedes convencer de la estrictez brutal de la oficina de control. No comprendo pongas en duda las dificultades insuperables ya que yo misma te propongo el único remedio que es el arreglo con Suárez para seguir sirviéndote los 3.000 frs. Ahora, como gran concesión me permiten enviarte 2.800 frs., de lo cual me doy a santa, pero pienso cuanto irá a durar puesto que me han advertido que esa suma será restringida. Creo que mis lágrimas algo pudieron. -Nada me has dicho sobre los cuatrocientos setenta y cinco -creo- francos de la letra que te mandé. Además de la enorme dificultad para esas compras clandestinas en que se hacen pagar el doble del valor de los francos, se corre el riesgo de que la secuestren y de que se pierdan.

Arregla tus asuntos como te aconsejo. Escribe inmediatamente a Ismael y dile a mi nombre que te mande un dinero que él me tiene allá, de lo que se mandó para el pleito de Casa-Real. Hazlo inmediatamente, no sea que se le ocurra devolverlos aquí cuando allá te vendrían tan bien. Yo también le escribiré más adelante si lo crees necesario, pero, eso no quita la urgencia de tu diligencia. Me cuesta mucho escribir por el estado de mi brazo cada vez peor y que aprovecho para escribirte a ti, niño mío adorado.

Prepara tus cosas para el regreso, no sea que te veas precisado a hacerlo sin que ni tú ni yo podamos evitarlo. No te imaginas mi angustia por todo lo que sucede. Eso de las influencias creo estás en la razón y que eres causante en parte porque si no te hubieras vuelto loco tan a destiempo, si hubieras aprovechado tu talento en el engrandecimiento de la patria seriamente y no en el bolcheviquismo físico y moral. Yo estoy vieja y retirada de mis campañas femeninas. Sé que puedo muy poco sobre todo según el estado decadente de los negocios y el monto de las deudas. El vino apenas se vende: hay en bodega 200 mil arrobas que a pesar de ser la bodega más apreciada de América y la que vende más, vende poco. Eso hijito mío disminuye las influencias como tú puedes comprenderlo. «Poderoso caballero es don dinero».

Pienso que es mejor incluirte esas letras para Ismael a fin de facilitarte la diligencia.

Adiós, hijo de mi alma, te abraza, te besa y te bendice tu Madre que te adora

Los tuyos en Apoquindo. El domingo si Dios quiere vendrán Vicentito y la Manola con Jorge.



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ArribaAbajoCarta Nº 9

Hijo mío. ¡Por un favor de Dios, obtuve dirección para hacerte llegar la expresión de mi cariño, de mi recuerdo permanente y de mi insaciable dolor de no verte!

¡Mi vida eres tú! ¡La incertidumbre sobre tu suerte me hace trizas! Cuando pienso puedas carecer de algo, que tengas hambre, que sientas frío, que estés enfermo, odio la abundancia en que vivo. Cuanto toco se me convierte en hiel, en herida insoportable.

Niño mío querido, para quien el mundo siempre me ha parecido estrecho y mezquino ¿Cómo tienes valor para torturarme con tu silencio? ¿Cuándo una palabra tuya me devolvería un rayito de la luz que me robaste? ¿Ignoras hasta qué punto me eres necesario? ¡Tu pobre vieja languidece y se consume en este mar de aflicción!

¡No temas ningún daño por mí! -¡Vicente, niño mío adorado, que no pueda yo esconderte dentro de mi corazón, para que ningún pesar te alcance! ¡Estoy rodeada de retratos tuyos, inútilmente, no me alcanzan las fuerzas para mirarte con los ojos de esta carne lacerada! ¡Los cierro y te beso con tal angustia que es imposible no percibas la vibración!

¡Hijo mío... mío... mío hasta lo infinito! ¡Cómo quisiera hacerte sentir, todo el dolor y el amor con [que] te llamo! ¡Parece que respiro mejor! ¡Que estos besos acumulados en todo mi ser tuvieran la virtud de atraerte para aliviarme de ellos!

¡Qué obsesión tu recuerdo despierta y dormida! ¡Cuántas veces sueño contigo! ¡Cuántas tonterías se me ocurren, de esas con que la imaginación distrae su angustia! Me parece oírte que me llamas...

¡Pobre corazón, empeñado en mantenerse de mentiras piadosas para atenuar el martirio... esa congoja lenta... lenta como la agonía de un tísico... esperando siempre!

¡Vicente, hijito mío, te estrecho contra mi corazón... beso tus ojos, como en los tiempos en que eran míos y te hacía llorar de tanto besarlos! -¡Estabas chiquito, y yo era tu grande amor!-

¡Por eso lloro! porque no puedo hacer retroceder el tiempo y arrancar, todo afecto, que empaña aquél-

¡Que la Santísima Virgen te devuelva a mis brazos sano y feliz! que pienses en tu

Madre

que te quiere más que nunca



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ArribaAbajoCarta Nº 10

¡Hijo mío de mi alma!

¡Qué falta le haces a mi corazón! ¿Dónde estás? ¡Lo ignoro! pero el alma me dice que no piensas en mi... que algo te retiene en la oscuridad sentimental en que te deje ¿Qué tienes? Explícate de corazón a corazón. El corazón de la madre no puede engañar sino servir de depositario de penas y alegrías, desde lo más hondo hasta lo superfluo. ¡Pensar que te falta algo, aumenta mi enfermedad! No conocer el momento que vives ¡Ya eso es inaudito!

Tú sabes cuánto te quiero y que no existe la palabra sacrificio en el diccionario sentimental de una madre. Habla hijo de mi alma. Vente luego, mis días están contados cada vez que miro hacia atrás comprendo como corren las horas que me conducen al fin.

Quiero partir de este destierro dejándote asegurado de alma y cuerpo.

No puedo ya más. Escríbeme, y regresa pronto.

La cuestión dinero la dejaste en el aire, explícame claramente.

Te abraza con la mayor ternura tu

Madre



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ArribaAbajoCarta Nº 11

Hijo de mi alma:

Me sorprendía tu silencio e ignoraba el número de tu residencia, esa era la causa de no escribirte antes. Tú sabes cuanto te quiero ¡Hijo rebelde!

Aquí estamos de percance: hubo que llevar a Santiago a Alberto Torres y se le operó de apéndice: lo tenía ya perforado. Estoy inquieta por él.

Mi salud sigue su curso, el brazo no se cansa de bailar y el pleseo solar empeñado en ganarte la partida.-

¿Y tú? Me hace falta verte. Cuídate... no estropees tu cerebro, ni te dejes arrastrar por una ideología contraria a tu espíritu. Creo que tu corazón te lleva por caminos errados: querrías ver felices a todos por parejo y eso es imposible pues se llega a este mundo diferentemente dotado. El destino de cada ser corresponde a su mentalidad. Es inútil pretender el dominio de la inteligencia porque emana del corazón del Creador, de ese Creador que te dotó lujosamente y espera que sepas corresponder a su rangosa generosidad.

Escríbeme seguido, para suplir tu lejanía que me entristece. Háblame de tu sangre. Bésalo a mi nombre, con ternura ¡Que la Santísima Virgen los guarde en su corazón!

Y para ti todo lo mejor que guarda mi querer, en un beso y el más estrecho abrazo de tu

Madre



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ArribaAbajoCarta Nº 12

Hijo de mi alma: Las equivocaciones no son mías sino de las inexplicables variantes que sufre el control. Ahora me acaban de avisar que el control me concede 2.000 frs. para el próximo junio, que te entregará el Anglo, los otros mil te los dará el Banco Francés Italiano con quien nos entenderemos en adelante si es que el Anglo no consigue otra suma como la anterior y entonces será el Banco francés quien continúe tu servicio. Ya por lo menos puedo descansar de angustias sabiendo no te faltará con qué vivir.

¡Y dices que tú te preocupas más de mí que yo de ti! ¡Qué absurdo eres niño loco! ¡Yo que estoy minada de tanto tragar hiel... pensando cómo normalizar esta máquina destruida por tu capricho! ¡Te atreves a decir que la familia ha formado un bloque contra ti, tú que arremetiste saltando todas las vallas! Y a pesar de todo puedo asegurarte que tus hijas te adoran, que tus hermanos te quieren, que tu padre no ha cambiado ¿Qué más se puede esperar, ya que tuviste la suerte de nacer en un hogar tan atrasado donde no existe el odio ni el rencor? Donde triunfa la sangre y todo lo borraría una palabra buena, una actitud afectuosa y decente. Tú dices que quieres salvarnos de la ruina, que quieres a bofetón limpio acostumbrarnos al cambio que vendría en la nueva civilización. Yo te he dicho repetidas veces que en cuanto a finanzas nada podríamos evitar, puesto que la crisis nuestra es mundial. Que en cuanto a ideologías moriremos confesando a Cristo y practicando su doctrina. Que yo deseo morir por mis ideas ¿Qué más? Prefiero que me lleguen de ti cariños, no agravios. Tal vez me equivoco, tus cariños me hacen más atroz esta separación, tan dolorosa. Me imagino tenerte en mis brazos y despierto midiendo la lejanía que no quieres acortar ¡Cómo te quiero! ¡Lo sabrás Allá, donde la verdad no se oculta bajo ninguna máscara, ya que aquí estoy condenada a las falsas interpretaciones porque siempre anduve con la verdad a flor de alma!

¿Cuándo te veré? ¡Dios quiera no privarme más tiempo de ti!

Te besa tu Madre de la tierra y que te guarde la del Cielo.



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ArribaAbajoCarta Nº 13

Hijo de mi alma: ¡Sonó la hora! Te veré por el favor de María Sma. tu Madre y la mía, lo cual aunque con la boca dices que no crees en mis ansias de verte, sé que son coqueterías de niño demasiado regalón.

Las cosas aquí van tan mal que [estoy] temiendo llegue el momento de no poderte enviar dinero y que te mueras de hambre. Tu papá te pide tomes el primer vapor que es el Reina del Pacífico y te vengas. Las cuentas son clarísimas: hoy día el franco está a dos pesos nuestros, tu pensión se nos convierte en seis mil pesos mensuales y el dinero que tenemos allá se nos concluirá pronto. Se han hecho todas las diligencias con el control de cambios a fin de asegurarte algo fijo, todo ha sido inútil. Ahora vamos a probar dónde está la resistencia. No te opongas, ¡te lo suplico! ¡Yo no podría vivir pensando que tú pasaras hambre! Del dinero que nos queda allá alcanza para pasajes de segunda, que según los entendidos es mejor en ese vapor que los de primera en los otros.

Hace tiempo te informé sobre el estado de los negocios: llevamos dos años en que la viña sólo produce para vivir sin alcanzar a pagar contribuciones ni intereses de las deudas con que nos pilló la horrible crisis. Ahora, comienzan a subir los precios por la malísima cosecha de este año en todo Chile, pero, con los cambios de gobierno no hay seguridad alguna del porvenir. Cada nuevo Ministro presenta un proyecto salvador, que lleva por resultado sacar nuevas contribuciones y empobrecer más y más.

Si Dávila pusiera su talento al servicio de la Patria con ánimo de restaurarla podría conseguirlo: es muy capaz. Pero el mundo dice que son los milicos los que mandan.

Hoy está aquí Cantalapiedra, vino por el día en un vapor que sale esta noche de regreso. Te recordó con alma vida y corazón. Está en casa de Manuelita.

Tus niños bien. No pongas inconveniente para el viaje porque no tenemos materialmente más dinero que mandarte que el que está allá y que concluye pronto, por eso tu papá prefiere te vengas lo más pronto posible.

No te escribo más porque estoy con el ataque a los riñones y no puedo resistir el dolor.

Te besa tu madre.

Tú no crees en los milagros. Gracias a la Teresita de Niño Jesús pasó la piedra y puedo agregarte algo más con la reliquia en el dolor.

Tu papá no está en Santiago, apenas llegue le mostraré la carta que mandas. Debo advertirte   —157→   que los derechos de aduana impuestos en Europa a los vinos son prohibitivos. Así se va todo en gastos. Ese es el motivo del atraso en el envío. Trae bastantes datos [a ver] qué se puede hacer.

«El Reina del Pacífico», sale el 3 de setiembre, ya después no sé qué otro bueno que dé seguridad, salga y sobre todo se atrasa demasiado el viaje y yo me alcanzo a morir de pena. Estoy demasiado vieja y acabada y toda impresión me afecta mucho.

Vente luego niño mío adorado.

Yoaco está de Ministro de Interior, pero, las alturas marean y él ha sufrido la metamorfosis consiguiente. Si no fuera así pasaría a conseguir algo para ti, hoy que tienes santos en la Corte.

Tengo el corazón de fiesta, pero, la cabeza revuelta. ¿Qué sucederá? ¿Y Manuelita? Sus penas son mías. Procura ser bueno, ser humano con ese ser superior.

Procuraremos te entreguen el dinero del 15 de sep. luego para los gastos imprevistos.

Te abraza con toda el alma tu

Madre









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ArribaCartas Facsimilares

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