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291

Cito siempre por la primera edición (Barcelona: José Janés, 1950); las frases citadas en p. 23. En adelante, indico ya en el texto la página de referencia entre paréntesis.

 

292

MARTIN NICOLAUS, El Marx desconocido (Barcelona: Anagrama, 1972), p. 87. La cita pertenece a una trad. de «Proletariat and Middle Class in Marx: Hegelian Choreography and the Capitalist Dialectic», Studies on the Left, 7 (1967); la cursiva es mía. Nicolaus señala con claridad que ésta es la posición del Marx posterior a los Grundrisse. Es sabido que Marx llegó en la redacción de El Capital hasta el inicio del tratamiento del problema de las clases sociales, que aquí no puedo abordar. Vid. GEORGES GURVITCH, Teoría de las clases sociales (Madrid: Edicusa, 1971). Es interesante para nuestro tema el artículo de divulgación de MARÍA ÁNGELES DURÁN, «Notas sobre la teoría marxista de la clase media», Sistema, N.º 22 (1978).

 

293

WERNER BEINHAUER, El español coloquial, 2.ª ed. corregida (Madrid: Gredos, 1968), p. 26. En p. 28, nota, dice sobre las formas «papá» y «mamá»: «Este galicismo... al principio sólo usual entre la burguesía, se ha generalizado tanto en España que aun el pueblo ya no lo considera afectado.»

 

294

DÁMASO ALONSO, «La muerte del 'usted'», en Del Siglo de Oro a este siglo de siglas (Madrid: Gredos, 1962), p. 265; ANDRÉS BELLO, Gramática de la lengua castellana, ed. revisada por Niceto Alcalá-Zamora (Buenos Aires: Sopena, 1964), p. 93, nota. Cfr. CÉSAR HERNÁNDEZ ALONSO, Sintaxis española (Valladolid, 1970), pp. 271-72. Uno de los pocos estudios generales sobre el tema es RAFAEL LAPESA, «Personas gramaticales y tratamientos en español», RUM, 19, N.º 74 (1970), 141-67.

 

295

Real Academia Española, Esbozo de una nueva gramática de la lengua española (Madrid: Espasa-Calpe, 1973), p. 344. No he podido ver WALLACE E. LAMBERT-G. RICHARD TUCKER, Tu, Vous, Usted: A Social-Psychological, study of Address Patterns (Rowley, MA: Newbury House, 1976), pero según GARY E. SCAVNICKY, Hispania, 61 (1978), 189, versa sobre el español de América.

 

296

MARIANO JOSÉ DE LARRA, «Costumbres. El casarse pronto y mal», en Obras, ed. C. Seco Serrano, BAE, 127 (Madrid, 1960), p. 109a.

 

297

B. PÉREZ GALDÓS, Fortunata y Jacinta (Madrid: Hernando, 1971), p. 69 («déme usted dos o tres días») y p. 169 («Mamá, ponme tú el pañuelo»).

 

298

Cfr. «Vaya, mamá, que tomas las cosas de una manera...» y «No trajine usted tanto, madre», en J. BENAVENTE, Obras completas (Madrid: M. Aguilar, 1940), IV, 699 y 703, respectivamente.

 

299

NICOS POULANTZAS, Les Classes sociales dans le capitalisme aujourd'hui (París: Seuil, 1974), p. 23; traduce casi literalmente a Marx, Sexto capítulo de El Capital, citado por él en p. 225. Se entiende por trabajo productivo el que produce directamente la plusvalía. No ignoro la existencia de discrepancias respecto a estas posturas; así, por ejemplo, RAÚL GARCÍA-DURÁN, en un muy claro libro de divulgación, El concepto de clase social (Barcelona: Avance, 1975), aunque va a la zaga de Poulantzas, sostiene, en cambio, que los empleados sí efectúan trabajo productivo, o pueden hacerlo. La del francés es, sin embargo, la postura más frecuente en los estudiosos marxistas, los cuales coinciden todos en la separación entre los conceptos de clase obrera y asalariados. Además de García-Durán y el trabajo citado en nota 9, vid., entre otros, MANUEL TUÑÓN DE LARA, Medio siglo de cultura española (1885-1936), 2.ª ed. (Madrid: Tecnos, 1971), p. 16.

 

300

Vid., en el mismo sentido, además de Poulantzas, MARTA HARNECKER, Los conceptos elementales del materialismo histórico (Madrid: Siglo XXI, 1973), p. 176. De propósito evito aquí toda referencia a la polémica sobre los conceptos, a veces cruzados, a veces antagónicos, de pequeña burguesía y «clases medias». Este último es rechazado por Poulantzas, quien, no obstante, se opone a Dahrendorf y los tratadistas que no creen en la existencia autónoma de la pequeña burguesía, a la que no concede ningún papel de equilibrio social. También soslayo toda discusión sobre temas tan de moda entre ciertos sociólogos como las «nuevas clases medias», los «cuellos blancos», etc.